MORELIA, Mich., 18 de diciembre de 2018.- Martha Teresita, la mujer que asesinó a sus tres hijas, pero que es inimputable por padecer un trastorno mental y de comportamiento, será excarcelada en seis meses o antes si se cumplen las condiciones establecidas para neutralizar cualquier riesgo.

El tribunal de enjuiciamiento, presidido por Fernando Hernández e integrado por Manuel Padilla Téllez y María Soledad López, determinó que ocurrió el hecho en el que perdieron la vida las menores identificadas como KJ, de nueve años; CF de seis, y RN de tres, pero no hay delito por la inimputabilidad de la acusada.

Por lo tanto, decidieron que debe estar sujeta a tratamiento por un periodo de 10 años y será entregada a su padre en seis meses o menos si él, la familia y los amigos con los que tendrá contacto reciben la educación psicológica que les permita identificar cualquier síntoma que implique riesgo.

Su padre, quien legalmente es su tutor, deberá acreditar a las personas que la cuidarán al menos durante las 16 horas diarias de vigilia, el domicilio de su hogar, su solvencia económica para cubrir la red de especialistas que requiere como un neurólogo, un psiquiatra, un psicólogo y un nutriólogo para su tratamiento.

Aunque la medida de seguridad se dictó por ser inimputable debido al padecimiento que sufre, el tribunal la condenó a la reparación del daño, pero como no se puede devolver la vida a las niñas, tendrá que pagar una indemnización por un total de un millón 108 mil 747 pesos a su esposo y padre de sus tres hijas, por ser la víctima indirecta.

Los integrantes del tribunal tomaron esas decisiones luego de que solicitar de manera oficiosa una última ronda de pruebas de cuatro especialistas, una trabajadora social, una médica general, una psicóloga y un psiquiatra, quienes coincidieron que el mejor lugar para Martha Teresita es donde haya gente que la quiera.

Las expertas que, a excepción del psiquiatra, son trabajadoras del Centro de Readaptación Social David Franco Rodríguez, donde Martha Teresita está recluida desde el 21 de marzo de 2016, señalaron que en el área femenil no existe un lugar para inimputables y que el medicamento que la mantiene bajo control lo provee su padre, porque ninguna institución del sector público lo tiene.

Cada una de ellas, por separado, desfilaron ante el tribunal y coincidieron en que al interior del Centro de Readaptación Social no existen los servicios de neurología y psiquiatría que ella requiere, por lo que tiene que salir al exterior cada que los necesita.

Aseguraron que la mejoría que ha tenido al grado de que actualmente es funcional, productiva, de buen trato y hasta distingue entre lo que es o no correcto es gracias al medicamento y no por internamiento que ha tenido en el Cereso, cuyo ambiente puede contribuir a agravar su mal.

El psiquiatra fue preciso al señalar que ese ambiente es nocivo para la salud de Martha Teresita y que no existe una institución adecuada donde pueda estar internada ya que, por ejemplo, en el hospital psiquiátrico José Torres Orozco, donde labora, solamente hay internamiento temporal, en casos de crisis, en salas grupos que no tienen individualidad alguna.

Consideró que Martha Teresita es víctima de un mal diagnóstico médico por lo que sostuvo que el mejor lugar para ella es su casa, con su familia, lo cual es un estándar común, y ejemplificó en primera persona: “a mí lo que más me gusta es mi casa, mi tasa, mi papel de baño y tocar mis cosas es lo que me da tranquilidad”.

La lectura y explicación de la sentencia fue programada para las 20 horas del 8 de enero de 2019, y a partir del día siguiente comenzará a correr el tiempo legal para que se recurran las medidas de seguridad dictadas la tarde de este martes.