MORELIA, Mich., 8 de diciembre de 2017.- Un 5.4 por ciento crecerá el monto captado por la entidad por concepto de remesas familiares al cierre de 2017, previó Heliodoro Gil Corona, académico adscrito a la Facultad de Economía de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).

Esta proporción representa una derrama económica por 2 mil 895 millones de dólares, misma que mantendría a Michoacán como el primer estado mexicano destino de remesas familiares, principalmente emitidas desde Estados Unidos.

Gil Corona detalló que la variación estimada para este año es tres puntos porcentuales interior a la observada en 2016, equivalente al 8.4 por ciento anual, un descenso que atribuyó a las políticas antiinmigratorias implementadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Asimismo, señaló que se proyecta que la tendencia a la baja en la tasa de incremento de la captación de recursos económicos a través de remesas familiares tendrá continuidad en 2018, como consecuencia de la persistencia de las acciones gubernamentales adversas a los migrantes en el vecino país del norte.

El académico nicolaita agregó que, de acuerdo con los datos proporcionados por el Banco de México (Banxico), de 2016 a 2017, para el periodo de enero a septiembre, Michoacán registró un alza del 5.3 por ciento en la atracción de remesas familiares; México reportó ingresos por este concepto en el mismo lapso por 21 mil 265.8 millones de dólares, de los que a Michoacán correspondió el 10 por ciento de este monto, mientras que Jalisco recibí el 9.6 por ciento, y Guanajuato, el 8.8 por ciento.

Morelia encabeza recepción de remesas en Michoacán

La capital del estado ha captado el 11.9 por ciento de las remesas recibidas por Michoacán entre los meses de enero a septiembre de 2017, lo que es 254.3 millones de dólares, cifra que coloca a Morelia como el primer captador de ingresos por este rubro.

Heliodoro Gil mencionó que en el estado son 36 los municipios que participan de manera significativa en la recepción de remesas familiares, las que son motor “clave” para incentivar el consumo interno y las economías locales.