MORELIA, Mich., 31 de julio de 2019.- La historia del fútbol mexicano no se puede concebir sin hablar de Don Ignacio Trelles. Pocos son los personajes que han dejado una huella imborrable en el balompié mexicano, tanto adentro como afuera de la cancha, y este miércoles lo recordamos por los festejos por su centésimo tercer aniversario de vida. 

Un 31 de julio de 1916 en Guadalajara, Jalisco, nació el hombre que fue hecho para el fútbol y que le entregó su vida a esa difícil profesión. Su aparición se dio con los Rayos del Necaxa en 1932, jugó también para el América, Monterrey, Chicago y el Atlante, escuadra con la que se retiró en 1948 debido a una fractura de tibia y peroné en su pierna derecha.

El caprichoso destino y sus innumerables caminos lo alejaron de los terrenos de juego, su gran pasión, para ponerlo en una banca, lugar del que se hizo dueño, del que se apropió y desde donde consiguió forjar una leyenda que rebasa el centenar de años rodeado de admiración y aprecio.

Inició su camino como estratega en 1950 con el Zacatepec, logrando en poco tiempo ascenderlo a la Primera División, pasó unos años más tarde al Marte de Morelos, escuadra con la que consiguió su primer título de Liga en 1954, iniciando así lo que sería una carrera llena de éxitos, ya que regresó al Zacatepec y los coronó en la máxima categoría en las temporadas 1954-1955 y 1957-1958.

Su etapa exitosa en clubes seguiría, después de no haber conseguido coronarse con las Águilas del América, llegó al Toluca, escuadra con la que resultó Bicampeón, llevándose los títulos en las campañas de 1966-1967 y 1967-1968

Pasarían diez años para volver a salir monarca del fútbol mexicano, en esta ocasión con un conjunto que haría historia en la década de los 70s, La Máquina Celeste de Cruz Azul. Con los cementeros, Don Ignacio Trelles se consagró monarca en las temporadas 1978-1979 y 1979-1980, culminando así su gran historia ganadora en clubes del fútbol mexicano.

Los Camoteros de Puebla en dos etapas (1972-1975 y 1990-1991), el Atlante (1983-1985) y los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara (1986-1989), serían los otros tres conjuntos que dirigiría a lo largo de su trayectoria.

Pero si el paso de Don Ignacio Trelles Campos fue exitoso a nivel clubes, con Selección Nacional no podría ser distinto. Participó en tres copas del mundo, la primera fue Suecia 1958, aunque en dicha competencia su rol fue un poco más de auxiliar.

Chile 1962 e Inglaterra 1966 fueron los dos mundiales en donde fungió como el estratega de los verdes, siendo recordado por ser el entrenador en conseguir el primer punto para México en una Copa del Mundo, al empatar con Gales en la Copa del Mundo de 1958 y en haber obtenido la primera victoria de los aztecas en un mundial, al haber derrotado por tres goles a uno a Checoslovaquia, que posteriormente se convertiría en subcampeón en territorio andino en 1962.

Otro de los eventos a los que Don Ignacio Trelles acudió como estratega del combinado mexicano fue a los Juegos Olímpicos de Tokio en 1964 y de México en 1968, quedando en los asiáticos en la Primera Ronda, mientras que, en nuestro país consiguió llegar a Semifinales.

Fue investido al Salón de la Fama del Fútbol en su primera generación en el 2011.

Hombre dedicado al fútbol, con una picardía y chispa inigualable, siendo pieza clave en la historia a nivel de clubes y de selección nacional en el balompié de nuestro país, cumple este miércoles 31 de julio 103años, celebración que todo el fútbol mexicano festeja con gran beneplácito.