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MORELIA, Mich., 15 de noviembre de 2018.- En un intento por acotar el creciente control que tiene la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado sobre las decisiones políticas y administrativas, la diputada Miriam Tinoco, como presidenta del Comité de Comunicación Social, presentó una iniciativa para que éste dependa del pleno y no de la Junta.
La diputada del Partido de la Revolución Democrática planteó que el Comité de Comunicación Social informe directamente al pleno y sea éste el que autorice sus políticas y presupuestos, sin intermediación previa de la Junta, ya que, finalmente, la condición de pluralidad y representación está satisfecha ya en su integración.
Argumentó que en el actual diseño parlamentario los Comités son órganos colegiados, se constituyen por disposición del Pleno para la supervisión y vigilancia de las unidades administrativas del Congreso, sin embargo, si bien se constituyen por el máximo órgano parlamentario, se sujetan a la Junta de Coordinación quien debe autorizar previamente a su presentación al propio pleno.
Las Juntas de Coordinación Política ejercen la representación de los representantes, como un órgano de interlocución, cuya voz y voto se realizan ponderadamente y su utilidad de control ha sido demostrada en la institución política del Estado, que por excelencia ejerce el control y el contrapeso a los demás poderes del Estado.
Reconoció que la eficacia de estos órganos de control interno ha sido probada bajo distintas denominaciones en la historia del parlamentarismo y ha demostrado su funcionalidad, pero su carácter es también voluntario, porque depende de la voluntad de los miembros que la integran o a quien finalmente representan.
“En casos como en la Ley Orgánica y de Procedimientos del Congreso del Estado es claro que esta ley se ha modificado para responder a crisis determinadas, pero no es del todo democrática, claro ejemplo es limitar el acceso a participar de la Junta de Coordinación Política a los partidos que obtengan una representación del Congreso de al menos el veinte por ciento, por decir sólo un ejemplo.
“También hemos de señalar, la creciente tendencia a la acumulación de poder, no sólo en términos políticos sino administrativos, o jurídicos, creando posiciones hegemónicas sobre el resto de las y los representantes, sobre los órganos técnicos y de apoyo, sobre las comisiones y los comités de esta soberanía, quienes tienen representaciones igualmente plurales y legítimas”.
Tinoco consideró que, si bien es necesaria la coordinación, también lo es la participación de los 40 diputados en la definición del rumbo del gobierno, la administración, las políticas públicas, los presupuestos y su aplicación, sobre todo para quienes pugnan por formas más democráticas de parlamentarismo.