Así son las kilométricas filas que hicieron jóvenes para la vacuna Covid

MORELIA, Mich., 27 de septiembre de 2021.- La fila inicia en la misma Avenida del Estudiante, donde está la entrada al módulo de vacunación en la unidad deportiva Ejército de la Revolución, mejor conocido como Venustiano Carranza.

De ahí hace un giro llegando a Bucareli, regresa por la misma Avenida del Estudiante y regresa otra vez a Bucareli para darle la vuelta hasta Olivares de Tzintzuntzan, tomar avenida Acueducto y llegar nuevamente a la Avenida del Estudiante para entrar al módulo.

Se observa mucha basura, hay montones de ella por fuera de los botes e incluso en la calle. Es producto de que los jóvenes hayan pernoctado en las inmediaciones del centro de vacunación.

Al interior, como en otras ocasiones, los responsables de aplicar la vacuna contra el Covid 19 ambientan con música de la generación de cada grupo etario, sin embargo, en esta vez se escucha Baño de mujeres, de Manuel Mijares, una canción que sonó a finales de los años 80 y que no tiene nada que ver con los jóvenes de 18 a 29 años.

A la entrada, una persona va apurando a los jóvenes de la fila para que preparen sus documentos y los presenten a los servidores de la nación.

Areli, una joven estudiante está saliendo del área de vacunación. Le ha parecido muy bien organizado el proceso para vacunarse. Avanza rápido la fila, señala, y reconoce que le dolió un poco el brazo cuando le pusieron la inyección. Ella llegó a las 7 horas, aunque desde el domingo estuvieron haciendo rondas, las cuales iniciaron a las 19 horas.

Paulina y Ricardo llegaron desde el domingo, también a las 19 horas. Cuentan que, al igual que muchos jóvenes, tuvieron que hacer rondas con otros amigos. 

Paulina cuenta que al inicio la fila tardó alrededor de unas dos horas en avanzar, y con el pasar del tiempo se mueve de manera más fluida. Dice que se siente bien para recibir la segunda dosis, no está nerviosa, pero ya quiere que pase.

“Es más tranquilo. Yo creo que es más fácil ahora, como que te sientes con el alivio de querer que todo salga bien y rápido”, dice Ricardo, quien asegura que no le dolió la primera dosis y en esta ocasión seguramente tampoco le dolerá; se siente más confiado.