MORELIA, Mich., 26 de noviembre de 2021.- La Tercera Mesa Ambiental que se realizó en Madero este viernes, para abordar la crisis ambiental de la región por la expansión aguacatera, es un momento cardinal para que el nuevo gobierno estatal muestre voluntad en torno a este tema, indicó el analista y activista ambiental Julio Santoyo.

Entrevistado por Quadratín, Julio Santoyo expresó que los acuerdos de estas mesas sí serían vinculantes. El hecho de que estén participando en este evento todas las autoridades ambientales, tanto federales como estatales, ante un reto muy concreto que existen toda esa región en el municipio de Madero, que incluye Acuitzio y los municipios de Nocupétaro y Carácuaro, ayuda.

En muchos lugares de Michoacán, dijo el analista, hace tiempo que ya está presente una expansión desbordada de los cultivos de aguacate, y no es porque se quiera estar en contra del cultivo del aguacate o de la economía, dejó en claro el activista.

En este sentido, externó, a esta altura, con la cantidad de hectáreas de aguacate cultivado, Michoacán ya no tiene sustentabilidad para producir esa cantidad aguacate por una razón: el aguacate es altamente demandante de agua, y ese líquido vital ya no existe, ya no está en los municipios mayormente productores de aguacate.

Esta realidad que enfrenta la franja aguacatera, también la está enfrentando el municipio de Madero. En esa demarcación, dijo, las huertas aguacateras se empezaron a instalar en las zonas donde mayor cantidad de agua existía de manera natural, y a estas fechas, a los tiempos actuales, cuando se presenta el tiempo de estiaje, las poblaciones tienen problemas para acceder a este líquido, aseguró, lo cual está generando hace unos cuatro años, una serie de conflictos sociales que cada vez se agudiza más.

Todo esto, señaló Julio, tendrá que llevar a la modificación de políticas ambientales, a establecer criterios prioritarios; “si el Gobierno de Michoacán, que recién se acaba de inaugurar, pretende hacer algo con respecto al medio ambiente, la reunión de este viernes en Villa Madero es un momento cardinal, es el propicio, ahí se sabrá si hay de verdad voluntad, y si están las condiciones en su gobierno para poder enfrentar este gran reto”, aseveró.

Los municipios también tienen incidencia en estos temas, señaló, porque las leyes ambientales les dan facultades, pero hay qué decir con precisión que las mayores facultades se las dan a las entidades federales y después a los gobiernos de los estados. A los gobiernos municipales les dejan apenas algunos elementos de intervención, y casi no les dejan elementos instrumentales para poder operar las acciones, refirió.

El gobierno de Michoacán que acaba de entrar, debe hacer una reconsideración de todo esto para hacer los ajustes en materia de legislación ambiental, que permitan contener este tipo de fenómenos que están generando una crisis ambiental en toda la zona de la franja aguacatera, y con ello se está contribuyendo de manera notable al cambio climático, explicó.

Dijo que hay unas zonas en la franja aguacatera donde la temperatura se ha elevado, y hay fenómenos de plagas que no se presentaban antes, porque las plagas también están asociadas a los problemas de la temperatura. Ahí hay un efecto concreto del cambio climático, y como consecuencia del cambio de temperatura, también hay una mayor evaporación del agua y menor acceso a la misma, y por ello un secamiento de los mantos freáticos que han sido dañados por la tala y el cambio de uso de suelo.