ZITÁCUARO, Mich., 18 de abril de 2016.- El presidente municipal, Carlos Herrera Tello, presentó pruebas documentales ante la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) por la desaparición de más de 175 millones de pesos que detectaron durante el proceso de entrega recepción de la administración municipal y esta semana iniciarán las vistas a los ministerios públicos federal y estatal para que se investigue.

“No es un asunto personal, es un asunto de rendición de cuentas donde yo exijo que la ASM diga con toda claridad como fue la administración municipal anterior, si está bien y si no, que finque responsabilidades para que el daño sea resarcido”.

En entrevista mencionó toda una gama de presunción de delitos como abusos laborales, desviaciones de recursos, falta de pago de impuestos, otras que no se pueden cuantificar, autocompras, proveedores inventados, presupuestos inflados, obras de mala calidad, obras inexistentes, nepotismo, compras a familiares.

El alcalde del Partido de la Revolución Democrática mencionó que, por ejemplo, en el aspecto laboral no se les informó de los laudos pendientes, pero ya en funciones recibieron 202 notificaciones de laudos y demandas perdidas y había que pagar 18 millones de pesos. “Nos dejaron el gallo muerto; ya nada podíamos hacer, sólo pagar”.

El desaseo administrativo y financiero era total; otro ejemplo, retuvieron pero no enteraron el Impuesto Sobre la Renta y el Sistema de Administración Tributaria nos está requiriendo 24 millones de pesos; tampoco pagaron el impuesto sobre la nómina, pero si lo cobraron; en total nos dejaron ese tipo de deudas por 54 millones de
pesos.

Entrevistado durante el segundo foro de consulta Hacia una nueva municipalidad, el empresario reconoció que no esperaba que la situación estuviera tan mal como la encontró, pero no solo en lo administrativo y financiero, sino también en el aspecto social.

“Escuchábamos que estaba mal, sabíamos que andaba mal, pero no tan mal; la descomposición del tejido social, la desesperanza que hoy se vive por el grado a abuso se percibe en la calle y nos va a costar mucho trabajo superarlo si no es con la participación de los ciudadanos, por lo mal que quedó Zitácuaro”.