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MORELIA, Mich., 25 de abril de 2016.- La Comisión Especial para acompañar a la Auditoría Superior de Michoacán en la revisión de la deuda pública estatal no va a encontrar nada en la cuenta ‘cargos por aplicar’ porque en ella únicamente se hacían los registros contables, advirtió el ex secretario de Finanzas y Administración, Miguel López Miranda.
“Yo ajusté la cuenta ‘cargos por aplicar’ con base en la opinión que había dado un auditor independiente que consideró estaba mal registrada y efectivamente se canceló, pero esa cuenta no tiene más que movimientos contables, no registra nada de lo que supuestamente pretende encontrar el Congreso; ahí se registraba como contrapartida contable los prestamos que el gobierno estuvo pidiendo de largo plazo y las afectaciones de la obras públicas que se fueron haciendo con esos préstamos, nada más”
Entrevistado en Palacio Legislativo a donde acudió a ponerse a disposición de los legisladores para cualquier aclaración con la Cuenta Pública 2014, explicó que durante el periodo en el que Salvador Jara Guerrero fue gobernador sustituto se contrataron tres mil 700 millones de pesos de deuda a largo plazo y se hizo el registro de su destino, mecánica que debieron seguir las anteriores administraciones, pero no lo hicieron.
El ex funcionario consideró que para responder al reclamo social sobre el destino de la deuda pública que asciende a casi 18 mil millones de pesos es que cada quien asuma su responsabilidad y dentro de sus facultades el Congreso fiscalice el destino de los recursos y ordenar a la Auditoría Superior de Michoacán que si encuentra responsabilidades las finque y proceda.
López Miranda dijo que el análisis del registro de la deuda pública y cruzarlo contra la obra pública realizada es un trabajo de detalle
pero es factible, sólo que no como lo está haciendo la actual legislatura.
El ex secretario de Finanzas y Administración durante la gestión de Salvador Jara Guerrero insistió en que el dictamen reprobatorio que hizo el Congreso de la cuenta Pública 2014 es porque se manejó como un asunto político y no como un asunto de técnica contable, por lo que también tiene un poco de ilegal.