MORELIA, Mich., 20 de junio de 2015.- El 53 por ciento del personal reportado por las administraciones públicas estatales en el Censo Nacional de Gobierno, Seguridad Pública y Sistema Penitenciario 2014 desempeñó funciones relacionadas con la educación básica y media superior, cultura y/o ciencia y tecnología.

Lo anterior de acuerdo con el Censo Nacional de Gobierno, Seguridad Pública y Sistema Penitenciario Estatales que señaló que estas funciones estuvieron  seguidas de los que realizaban acciones asociadas con salud (12.1%) y con la seguridad pública (10.6%).

Desde hace algunos años, el reconocimiento y la necesidad de incluir a un mayor número de mujeres en las actividades de gobierno se ha fortalecido; esta necesidad se sustenta en un principio de equidad desde el cual se impulsa la idea de que mujeres y hombres deben tener las mismas oportunidades para participar en las instituciones y en la toma de decisiones.

Con base en este enfoque sobre la necesidad de promover la equidad de género en las instituciones gubernamentales, la información estadística permite comprobar que existen desequilibrios en lo que corresponde a la participación femenina en las administraciones públicas.

Estos desequilibrios se relacionan con al menos dos tipos de segregación: horizontal y vertical. La segregación horizontal se refiere a la concentración de mujeres en determinados espacios o funciones, tales como labores administrativas, de apoyo u otras de menor jerarquía. La segregación vertical se observa en la concentración de mujeres en la base de la pirámide de la estructura organizacional, en ésta se muestra que “a mayor jerarquía en la pirámide se evidencia una menor presencia femenina y mayor presencia de varones en la cúspide de la organización”