Localizan cuerpo desmembrado en inmediaciones del Punhuato
MORELIA, Mich., 18 de noviembre de 2015.- Una ciudadana americana de nombre Sandra Gasca denunció presuntamente haber sido víctima de secuestro y de abuso de autoridad por parte del director de Seguridad Pública del municipio de Villa Jiménez, Roberto Murillo Hernández.
Los hechos se registraron el pasado viernes 13 de noviembre, cuando Sandra se encontraba en el domicilio de Salvador Álvarez Sánchez, y siendo las 23 horas la víctima decidió retirarse del lugar.
Al salir, dos patrullas de la Fuerza Ciudadana se estacionaron a las afueras del domicilio de su acompañante para exigirles de manera violenta que subieran a las unidades. La reacción de los agraviados fue exigir una explicación a los uniformados, situación que provocó de manera inmediata que los oficiales comenzaran a propinarles una serie de golpes para posteriormente subirlos a las patrullas, en donde a bordo se encontraba el director de Seguridad Pública de Villa Jimenez.
“Yo me resistía a subir, me subieron a la fuerza, pero entre golpes y cargándome me llevaron”, detalló Sandra, quien comentó que los elementos policiacos patrullaron con ellos a bordo por un lapso cercano a una hora.
Durante el camino que cesaría en el estacionamiento de la dirección de Seguridad Pública las agresiones no pararon y entre golpes, Roberto Murillo, le advertía a Sandra “que la llevarían con unos amigos que se iban a divertir mucho”.
El trayecto paró en la dirección de Seguridad Pública, en donde Sandra describió que Roberto Murillo comenzó a sofocarla con una toalla mojada, mientras el resto de uniformados la pateaban en diferentes partes de su cuerpo.
A consecuencia de sus nulas posibilidades de respirar, señaló que perdió el conocimiento por momentos, y al despertar los golpes no cesaban. “Por momentos me desmayaba porque no podía respirar y me seguían golpeando”.
Tras las agresiones físicas, el director de Seguridad Pública sacó de una de las unidades dos bolsas con cocaína para intimidar a Sandra diciéndole que si decía algo la inculparían por haber sido sorprendida con los estupefacientes.
Los amedrentamientos no cesaron
Por temor, Sandra Gasca no procedió a interponer la denuncia de manera inmediata, pues declaró que los rondínes de Fuerza Ciudadana por su domicilio eran constantes.
Fue apenas el pasado lunes cuando acompañada de su madre, Rosalinda Cano Tovar, decidió dirigirse al Ministerio Público de Zamora para presentar la denuncia formal, y al salir de su domicilio un grupo de uniformados impidió que emprendieran dicha acción.
Entre amenazas, subieron a su madre a una patrulla y la llevaron a la presidencia de Villa Jiménez, en donde el síndico, Jaime León, acompañado de Roberto Murillo, intentó sobornar a Rosalinda Cano con 15 mil pesos a cambio de signar un convenio de desistimiento.
La reacción inmediata de la madre fue indicarle al síndico del municipio que convencería a su hija de no proceder, sin embargo, fue un argumento de engaño para poder evadir la propuesta que se le había planteado.
Una vez en su domicilio, la señora Rosalinda recurrió al Comité Municipal del Partido del Trabajo (PT) de Villa Jiménez para ser orientada. Ahí, recibió asesoría para que posteriormente el representante jurídico de este organismo, Salvador Rodríguez Coria, las convenciera de proceder legalmente ante este hecho.
Ese mismo lunes la denuncia fue presentada en el Ministerio Público de Zamora, por los delitos de abuso de autoridad, secuestro, tortura y discriminación de origen; este último debido a que como se mencionó, Sandra cuenta con nacionalidad Americana.
Los señalados por Sandra fueron el director de Seguridad Pública, Roberto Murillo, el síndico, Jaime León, y otro elemento más identificado como Vicente Trejo.
Además de la denuncia, Salvador Rodríguez informó que el consulado americano ya tiene conocimiento del hecho, e indicó que se agregarán una serie de recomendaciones por la Unión Americana en el expediente.
Pese a la denuncia, el director de Seguridad Pública de Villa Jiménez continúa operando, e incluso en el Ministerio Público de Zamora pretenden tipificar únicamente el delito por abuso de autoridad.