MORELIA, Mich., 1 de junio del 2014.- De regular a mala la actividad comercial en el Centro Histórico de la capital michoacana, reportaron varios titulares de negocios del primer cuadro de la ciudad.
La opinión general luego de un sondeo realizado por Quadratín es que este año ha sido más bajo que años anteriores en cuanto a afluencia de clientes, sean turistas o locales, y entre los motivos de este comportamiento destacaron la mala situación económica que se vive y la imagen de inseguridad que se vive del estado.
Del ramo restaurantero y hotelero, Enrique Martínez Ortiz, gerente de un negocio de este tipo ubicado casi frente a Catedral consideró que, aunque no tiene cifras exactas, cayó la afluencia de clientes hasta en un 40 por ciento en relación con el año pasado, sin embargo, a estas fechas, nota que existe una leve recuperación.
Agregó que un factor que influye en los pocos clientes es la mala imagen que se tiene del estado en aspectos de seguridad, lo que ahuyenta a los turistas, que son los principales clientes de este tipo de negocio.
José Luis Reséndiz Ramírez, encargado de otro negocio del ramo restaurantero, más dedicado a la comida tradicional, como quesadillas, sopes, enchiladas y otro tipo de antojitos mexicanos, consideró que desde finales del año pasado la afluencia va a la baja. En medio de un local casi vacío en un domingo por la mañana, el encargado señaló como la principal causa de esta dinámica es mala situación económica que se vive en general en la ciudad y el estado.
Dentro de La Plaza de la Tecnología, pasadas las 10 de la mañana, los muchos locales se veían cerrados y todavía muy poca gente andando por los pasillos. En uno de ellos, un local abierto lo atendían por Azucena Martínez López y Antonio Pedroza Díaz, quienes señalaron que la afluencia de personas a esta plaza va a la baja desde principios de año. Cambiaron los días de mayor venta, dijeron, pues antes eran los fines de semana y ahora son principalmente los lunes.
Agregaron también que los clientes sufrieron una baja en su condición económica, pues ahora tardan hasta 20 días o un mes en comprar un artículo electrónico, ya sea un celular, una Tablet, una computadora o una memoria USB. Antes, dijeron, la persona lo compraba al momento o cuando mucho duraba una semana en regresar y adquirir el artículo.
En otro punto del Centro Histórico, en la plaza comercial Tu Plaza de San Francisco, sólo había tres personas laborando: el guardia de seguridad, la encargada de los baños públicos y el cerrajero. Éste último es el único que tenía su local abierto, uno de 160, aproximadamente, con los que cuenta este edificio.
Rodrigo Burgos Cortés, quien se identificó como “el cerrajero de San Francisco”, dijo que ya la gente bautizó esa plaza como “La Plaza de los Candados”, pues es común observar sólo las cortinas cerradas de los locales, cada una con más de un candado resguardando la mercancía que hay dentro o simplemente cuidando un local vacío, como en la mayoría de los casos.
En el caso de esta plaza, la actividad, calificó Burgos Cortés “está muerta”. En la historia de esta plaza se cuentan pocos meses de buena actividad y el resto es de traspasos, abandonos de locales, decepciones comerciales y nada más que abandono de los locales.
Desde su opinión, ni el gobierno ni los locatarios tienen un interés por ese espacio y el resultado es el abandono. Comparó la situación con Tu Plaza San Juan, donde dijo que ahí el día de la fiesta, el 24 de junio, no falta la banda para celebrar y la presencia de personas del ayuntamiento para conmemorar el día festivo de ese lugar; en cambio, en Tu Plaza San Francisco la atención del gobierno es nula.