Con mole festejan a la virgen de la Candelaria en El Laurelito
MORELIA, Mich., 2 de febrero de 2016.- La Virgen de la Candelaria es la patrona de El Laurelito y hoy fue su fiesta, pero ahí no se sirvieron tamales sino mole, como en todas las grandes ocasiones de esa localidad de la tenencia Jesús del Monte, ubicada al sureste de la capital michoacana.
Ese caserío donde habitan unas 162 personas originalmente era conocido como Laizama o Los Reyes, pero a los vecinos no les gustaba y, como utilizan mucho el laurel para condimentar sus alimentos, a José Jorge Díaz Tinoco se le ocurrió que se llamaría El Laurelito.
Es el nombre oficial, así lo dice su sello, la escuela aunque sea de una sola aula y pronto la clínica, porque hoy, durante el festejo de su patrona, acordaron pedir ayuda para tener medicinas y doctor, para ellos un servicio básico porque hacen una hora de camino para llegar a Morelia.
Y eso para quienes tienen vehículo porque el servicio de transporte público únicamente llega a ese lugar dos veces al día, a las 06:30 y a si hay usuarios a las 12:30 y, en fines de semana a las 18:30, pero depende de la buena voluntad del checador de la base de San José de las Torres, por lo que una hora para llegar a donde haya un médico es mucho tiempo cuando alguien se enferma.
Acordaron también, en torno a la Virgen de la Candelaria, trabajar para completar el sinuoso camino, tramos con pavimento de concreto y tramos de terracería, que lleva al bosque en el punto más alto del municipio, frente al Pico Azul, sustento de sus habitantes aunque insuficiente porque sólo explotan la resina y tienen que bajar a la ciudad para trabajar como intendentes o albañiles.
La Virgen de la Candelaria parece ser el eje de ese caserío, pero en realidad lo es José Jorge Díaz Tinoco, porque hasta ella le debe a él que el templo se le consagrara.
“Fue otra ocurrencia, cuando lo estábamos construyendo una sobrina pidió que pusiéramos una virgen que se llamara como ella y como se llama Candelaria… es la patrona”, cuenta José Jorge con desenfado durante la comilona.
Él ha sido encargado del orden en cuatro ocasiones, del consejo de vigilancia dos, comisariado ejidal una y de la sociedad de padres de familia 3 y aunque no para de hacer gestiones, dice que le hace falta el traje para que lo tomen en cuenta.
La última vez que recibieron ayuda fue cuando Cuauhtémoc Cárdenas era gobernador, para introducir el agua potable y construir el aula; poco tiempo después fue Samuel Maldonado Bautista cuando fue presidente municipal, pero sólo les regalo un aparato de sonido.
Desde entonces ninguna autoridad se para por esos rumbos, los programas sociales no llegan y la gente los necesita, señala José Jorge quien de día trabaja como intendente en la Universidad Vasco de Quiroga.
Ahora lo que le preocupa es la seguridad porque dice que gente desconocida sube a los bosques y temen que se apropien de sus tierras y siembren mariguana y quien sabe que pueda pasar, advierte José Jorge de 64 años de edad.
“Yo por eso estoy en desacuerdo con que se legalice el consumo de la mariguana, de por si la gente está desquiciada…”, indicó el ejidatario.
Ahí, entre los bosques del sur de Morelia, la Virgen de la Candelaria es más que la paga de tamales de quienes encontraron un niño Dios en la Rosca de Reyes, es la protectora de José Jorge, el alma de ese caserío.