MORELIA, Mich., 28 de febrero de 2015.- En tres años se aseguraron más 300 inmuebles con un valor aún no determinado, pero que se estima ronda los dos mil millones de pesos, al cartel de Los Caballeros Templarios, de acuerdo a un recuento hemerográfico propio.
Hoteles, complejos turísticos, ranchos, minas, más de un millón de toneladas de mineral y 50 mil toneladas de madera, residencias, casas habitación, autos, droga, animales.
Apenas el pasado 15 de febrero la Procuraduría General de Justicia del Estado dio a conocer que en Aquila y Coahuayana se aseguraron 62 inmuebles, entre ellos cuatro hoteles, tres complejos turísticos en zona de playa, dos centros de espectáculos, una hacienda, dos estaciones de servicio de gasolina, tres ranchos, una huerta platanera, terrenos, casas habitación y residencias de lujo, algunas de ellas con albercas, sótanos y compartimientos secretos de diferentes dimensiones, además de 100 cabezas de ganado de distintas razas.
En un operativo que duró tres días, del 7 al 12 de enero de este 2015, fue asegurada una veintena de propiedades, 10 en Apatzingán, cinco en Múgica y cinco más en la localidad de Antúnez, municipio de Parácuaro.
El pasado 28 de noviembre se aseguraron 41 propiedades, dos Morelia, dos en Apatzingán y 37 en Arteaga.
El 20 de noviembre del 2014 se dio a conocer el aseguramiento de 22 inmuebles en Lázaro Cárdenas, entre ellos una gasolinera, tres casas, una de ellas de tipo residencial; 11 casas habitación, dos ranchos, un complejo turístico en playa, una finca y un corral, un autoservicio y un casino.
Durante el 2014, se incautaron otros 8 inmuebles, el 10 de octubre, en Tumbiscatío que se sumaron tres más que habían sido asegurados una semana antes en ese mismo lugar.
Probablemente sin mayor valor económico pero sí simbólico, varios objetos de culto de Los Caballeros Templarios como una espada de acero con la que presuntamente se iniciaba a los caballeros templarios fueron asegurados en el poblado de Antúnez a principios del 2014.
Junto con esta espada se encontraron dos túnicas con la insignia que los distinguía, 50 rifles, 50 cuernos de chivo y aproximadamente 3 mil cartuchos, en el interior de la Hacienda La Huerta, a tres kilómetros de la cabecera municipal de Apatzingán.
Pero los aseguramientos de bienes inmuebles a los Caballeros Templarios iniciaron desde el 2012, cuando elementos del Ejército Mexicano ubicaron en Apatzingán, el rancho “Los Caballos”, propiedad de Enrique Plancarte Solís, alias “Kike Plancarte” o “Kiki”.
De acuerdo con un comunicado de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se encontraron en el rancho 13 kilogramos de marihuana; 600 gramos de cristal; 80 gramos de cocaína; 15 armas cortas y 19 largas; un fusil Barret calibre 50 milímetros; 106 granadas calibre 40 milímetros; cuatro granadas de fragmentación y una de mortero; 17 aditamentos lanzagranadas para calibre 40 milímetros; tres cohetes calibre 85 milímetros; un lanzacohetes antitanque; 339 cargadores para diferentes calibres; 22 mil 260 cartuchos de diferentes calibres, y cinco espadas. El Ejército también decomisó un millón 152 mil 526 pesos, 312 mil 310 dólares americanos, dos vehículos (uno con reporte de robo) y equipo táctico diverso.
Los inmuebles pertenecían a los exlíderes templarios abatidos o presos Nazario Moreno González, Enrique Plancarte Solís y Francisco Galeana Núñez, El Pantera, así como a Mario Alberto Romero Rodríguez y Víctor Hugo Almazán Mendoza, José Julio Méndoza “El Parota”, Servando Gómez Martínez , La Tuta, entre otros.