Violencia en comunidades refleja hartazgo, no impartición de justicia

MORELIA, Mich., 10 de junio de 2025.- Lo que está pasando en Michoacán en general y en particular en las comunidades indígenas con respecto a la violencia, muestra el hartazgo que hay, manifestó Pavel Guzmán, vocero del Consejo Supremo Indígena de Michoacán (CSIM), dejó en claro que como consejo no alientan a las comunidades a que hagan justicia por su propia mano.
El vocero externó que lo ocurrido en Cherán con el linchamiento de un presunto delincuente, refleja el hartazgo que hay en el sistema de seguridad y de justicia, "más del 90 por ciento de las denuncias que se presentan ante la autoridad judicial quedan impunes, hay una impunidad sistémica, la gran mayoría no tiene ni siquiera órdenes de aprehensión".
Aclaró que ellos como consejo supremo no buscan impulsar que las comunidades hagan justicia por su propia mano, "comprendemos y respaldamos a los compañeros de Cherán, nos declaramos listos si así lo determinan, en apoyarlos, siempre actuamos en petición de parte y si no lo solicitan estaremos con gusto apoyando", aseveró.
También dijo que esto pone sobre la mesa una deuda histórica hacia las comunidades originarias en torno a la justicia, e incluso hay más de 200 jueces tradicionales o jueces menores que trabajan en las comunidades de facto.
Esto significa, detalló, que no tienen el reconocimiento del Poder Judicial de la federación o del Estado, "hace como 10 años les quitaron en una reforma al Poder judicial del Estado, los sellos y las atribuciones, sin embargo estos jueces se han mantenido porque son los que resuelven en la práctica los problemas que tienen las comunidades", aseveró.
Todo esto dijo viene desde tiempos prehispánicos, porque vi un portador de la voz o de la palabra que administraba la justicia, y había unos 200 señoríos que tenían su propio sistema de justicia, que era aprobatorio, también se tenían que presentar pruebas, era oral, era acumulativo.
Entonces los jueces menores que hay son herederos de ese sistema, indicó, lo que refleja que "no dejan que las comunidades hagan justicia por su propia mano pero tampoco reconocen su sistema de justicia ancestral".
Por hechos que han acontecido ya hay focos rojos en las comunidades originarias, aseveró Pavel Guzmán, son temas graves de inseguridad sobre todo en la meseta y en la cañada de los 11 pueblos.
"Ahí no ha cumplido el Estado Mexicano con su compromiso, hay minutados ya acuerdos donde va a haber base de operaciones interinstitucionales en Santa Fe de la Laguna para todo el lago de Pátzcuaro, en Sabina para la región de la meseta, y en Ocumicho, y no han cumplido", refirió.