Revive Congreso de Michoacán debate por el Fobaproa

MORELIA, Mich., 7 de mayo de 2025.- El Congreso de Michoacán fue sede de un encendido debate entre Morena, PRI y PAN, cuyos legisladores reabrieron las heridas del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa), aquel rescate bancario que en 1994 convirtió la deuda privada en una carga pública que aún pesa sobre los mexicanos.
Lo que comenzó como una clase de historia terminó en un choque de perspectivas ideológicas, reproches de responsabilidad, corrupción y demanda de justicia, donde el oficialismo centró la crítica contra el expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León, quien en días pasados reapareció en la escena pública para criticar al gobierno de la 4t.

Hoy alzamos la voz para denunciar uno de los periodos más oscuros de nuestra historia reciente, el sexenio de Ernesto Zedillo, cuyas políticas entreguistas y represivas dejaron una herida abierta en la nación”, lanzó Fabiola Alanís Sámano, coordinadora parlamentaria de Morena, quien fue la primera en poner el tema sobre la mesa.
La legisladora señaló al expresidente como el principal responsable del saqueo económico. Con cifras precisas, recordó cómo el Fobaproa transfirió 65 mil millones de dólares, el 15 por ciento del Producto Interno Bruto, de deuda privada a las finanzas públicas.
El error de diciembre del 94 no fue tal, fue una verdadera estafa”, subrayó, mientras algunos legisladores asentían y otros murmuraban con desdén. La intervención no fue sólo una acusación económica, denunció también el impacto humano del sexenio de Zedillo, pues evocó la masacre de Acteal, en 1997, donde 45 indígenas tzotziles fueron asesinados en Chiapas bajo la “omisión cómplice” del gobierno.
“Mientras Zedillo hablaba de modernidad, los pueblos originarios eran abandonados a la violencia paramilitar”, acusó.

Sin embargo, las voces críticas no tardaron en alzarse. Desde su curul, la diputada del PRI, Adriana Campos Huirache tomó la palabra para señalar que muchos de los colaboradores de Zedillo hoy están en el gobierno federal, incluidos personajes como Arturo Zaldívar, Patricia Mendares y Esteban Moctezuma.
Hay que decir la verdad completa”, sentenció, dejando en el aire la pregunta de si quienes criticaban el pasado también eran cómplices.
Entonces Fabiola regresó el debate al eje original: la responsabilidad histórica de Zedillo. “Nada exime a Ernesto Zedillo de lo que se le ha señalado con mucha precisión”, afirmó, y enumeró las consecuencias de su administración: pobreza extrema, deuda impagable y una concentración de riqueza que, según dijo, sigue perpetuando la desigualdad en México.
El salón de plenos se volvió una arena de acusaciones cruzadas, donde cada intervención parecía una estocada. El diputado de Morena, Juan Pablo Celis Silva, acusó a las bancadas opositoras del PRI y PAN de haber aprobado el Fobaproa, una deuda con la que rescató a unos cuántos y empobreció a muchos, lanzó.

El intercambio de argumentos prosiguió. “¿Ellos, quienes también formaron parte, ya ahora están limpios de pecado sólo porque están en Morena?”, cuestionó con ironía la diputada del PAN, Vanessa Caratachea.
El Fobaproa, más de 25 años después, es una herida en la política mexicana, un recordatorio de cómo las decisiones tomadas en la cima del poder pueden marcar el destino de millones. En el Congreso de Michoacán, este miércoles, el pasado se hizo presente, más vivo que nunca, para pasar facturas políticas a la oposición en un contexto en que Morena y sus aliados se ostentan impolutos.