MORELIA, Mich., 14 de marzo de 2019.- Reformas al Código Penal para tipificar la violación de la intimidad sexual, ampliar los conceptos de hostigamiento y acoso sexual así como aumentar las penas de tres a cinco años de prisión y multas de mil a mil 500 UMA para esos delitos propuso el diputado del Partido Acción Nacional, Oscar Escobar.

En una iniciativa de ley que presentó al pleno de la 74 Legislatura comenzó por describir la historia de la Gordibuena de Huachinango, alias que se puso a Olimpia Coral Melo por parte de su ciber-depredador, sextorsionador y acosador, al subir en redes sociales y en una miríada de páginas pornográficas el video en el que la joven de dieciocho años mantenía relaciones sexuales con su novio.

Las imágenes fueron obtenidas por el ciber-delincuente al hurtar el teléfono celular, desbloquear la contraseña y proceder a transmitir datos personales sensibles a cuanto amigo, cómplice y página de internet se le ponía en frente, convirtiendo la vida de Olimpia en una pesadilla en su pueblo natal por el linchamiento social y la pseudo-superioridad moral contra su persona, indicó el también dirigente del PAN en la entidad.

Escobar dio datos duros para sustentar su propuesta: 25 de cada de cada cien jóvenes usuarios de internet ha sido víctima del ciberacoso y el ciberbullying, según lo ha afirmado el propio INEGI y las denuncias expuestas a nivel nacional e internacional por The Social Intelligence Unit.

El grupo de usuarios de Internet que resulta ser más vulnerable, es el que fluctúa en edades de entre los doce y los veinte años, destacando que han sido las mujeres, quienes con frecuencia son sistemáticamente más violentadas, ya que el veintiocho por ciento ha vivido ciberacoso en comparación con el veinticinco por ciento de los hombres, lo anterior se traduce en al menos 9 millones 64 mil 365 mujeres que ya han sido víctimas de ciberacoso y otros ilícitos análogos.

El Centro Iberoamericano para el Desarrollo e Investigación de la Ciberseguridad (CEIDIC) reveló que el 80 por ciento de los casos de sexting, ciberbullying, ciberacoso y sextorsión contra menores de edad son ocasionados por sus propios compañeros, aunque aproximadamente el 20 por ciento proviene de adultos.

Según la Organización Civil Luchadores, la Violencia en Línea Contra las Mujeres en México, 13 tipos de violencia a través de Internet: acceso no autorizado (intervención) y control de acceso, monitoreo y acecho, control y manipulación de la información, amenazas, extorsión, suplantación y robo de identidad, difusión de información personal o íntima sin consentimiento, expresiones discriminatorias desprestigio, acoso, abuso y explotación sexual relacionado con las tecnologías, afectaciones a canales de expresiones y omisiones por parte de actores con poder regulatorio.

En otro estudio, elaborado por la Universidad Internacional de Valencia sobre Cibervictimización por acción negativa recibida, arrojó que: el 29.6 por ciento corresponde a hablar mal y esparcir rumores; 25.9 por ciento a imágenes negativas en redes; 14.8 por ciento a recibir mensajes de extorsión; 11.1 por ciento a recibir mensajes insultantes; 7.4 por ciento a recibir mensajes con amenazas y 3.7 por ciento a ser fotografiado o filmado en situación negativa y compartido en la red.

Luz María Velázquez Reyes, del Instituto Superior de Ciencias de la Educación del Estado de México, realizó un estudio con estudiantes de preparatoria y licenciatura, con el que mostró que el 80 por ciento había visto imágenes de personas semidesnudas o desnudas en las redes sociales, 20 por ciento se tomó fotografías o videos sexualmente sugestivos, 20 por ciento recibió invitaciones para retratarse en poses eróticas o pornográficas.

El 45 por ciento compartió material erótico recibido por teléfonos celulares, 10 por ciento lo ha publicado en sus perfiles o lo ha enviado a sus contactos, 60 por ciento recibió imágenes o videos con estas características, 25 por ciento de los casos, los jóvenes los comparten con su pareja, y el 10 por ciento, con personas cercanas y 55 por ciento de los encuestados conoce a alguien que guarda fotografías o videos de novias.