La dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) admitió que la creación de la Comisión Nacional de ética en agosto de 2017 fue consecuencia de los señalamientos de corrupción contra algunos actores del tricolor; aunque dejó claro que a la fecha no hay ningún expediente abierto, señaló que transgredir la norma interna puede costar desde sanciones hasta denuncias penales.