Respaldan sindicalizados del Sidemm a Toño García
MORELIA, Mich., 7 de abril de 2021.- La edad en que los humanos comienzan a delinquir es de entre los ocho y los 14 años, alcanzando su cumbre entre los 15 y los 19, acabando progresivamente entre los 20 y los 29, según datos de un estudio realizado por la investigadora Terrie Moffitt de la Universidad de Duke en Durham, Carolina del Norte.
El estudio citado por el diputado Sergio Báez en su iniciativa de Ley para prevenir la violencia señala que, sin embargo, hay un grupo que nunca abandona su trayectoria criminal, identificándose que en este porcentaje se encuentran personas que comenzaron a cometer delitos antes de los ocho años y tuvieron una infancia marcada por los abusos, la falta de atención de sus padres y cuidadores, aunado a las carencias económicas.
También citó información del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, que estima que en México, seis de cada diez niños y niñas sufren maltrato infantil y los datos del Censo Nacional de Impartición de Justicia Estatal 2018 del INEGI, cuando se contabilizan en el país 5 mil 888 adolescentes procesados y sentenciados; de los que, mil 216 enfrentan proceso legal o ya purgan condena por delitos relacionados con el narco, como posesión simple de narcóticos, posesión de drogas con fines de comercio o narcomenudeo.
El legislador de Morena consideró que la infancia y la adolescencia son más que el simple paso del tiempo desde que se nace hasta la adultez, son las etapas de la vida que marcan el futuro como personas y en consecuencia el del estado y el país, porque es ahí donde se define si seremos personas buenas y de utilidad para la sociedad y nosotros mismos, o si seremos del grupo de seres humanos que dedican su vida a la delincuencia.
Por ello, los niños y niñas tienen que estar en la escuela, en los lugares de recreo, crecer fuertes y seguros de sí mismos y recibir el amor y el estímulo de sus familias y de su comunidad, protegidos contra los malos tratos y la explotación.
No obstante, reconoció que la sociedad y las autoridades le han fallado a la niñez, pues no son capaces de garantizarles siquiera un plato de comida, menos un par de zapatos para estrenar y por ello niños y adolescentes son blanco fácil de la delincuencia.
Es a partir de ese reconocimiento que hizo la propuesta de ley con la que se podrá construirles un mejor futuro, por mostrarles que hay un mundo en el que no todo es malo, que hay algo más allá que pertenecer al grupo criminal de su pueblo.