MÉXICO, DF., 11 de agosto de 2014.- Un video de la agencia Quadratín Michoacán sirve como evidencia a los abogados defensores del fundador de los grupos de autodefensa, José Manuel Mireles, para inferir que el médico fue torturado el día que fue detenido y trasladado vía aérea de Lázaro Cárdenas a Morelia.
Al presentar parte de las pruebas que integran el expediente con el cual la defensa ostenta violaciones al debido proceso y a los derechos humanos, la abogada Talía Vázquez Alatorre exhibió varios materiales audiovisuales, entre ellos un contenido periodístico de Quadratín, fechado el 27 de junio, en cual se informó sobre el aterrizaje del helicóptero que trasladó a Mireles de Lázaro Cárdenas al hangar de la Procuraduría General de Justicia del Estado en Morelia.
La defensa esgrimió que el Black Hawk de la Policía Federal partió entre las 16 y 17 horas de Lázaro Cárdenas- municipio en donde fue detenido Míreles y dos de sus escoltas- pero aterrizó a las 21 horas en Morelia, donde los detenidos fueron puestos disposición del agente del Ministerio Público estatal.
Esto significa, abundó Vázquez Alatorre, que el trayecto que dura normalmente 45 minutos vía aérea de Morelia a Lázaro Cárdenas, en esa ocasión se realizó en cuatro horas, pues según la información que consignó Quadratín, en el video se detalló que el aterrizaje en la sede estatal de la procuraduría fue a las 21: 10 horas.
En otro video presentado por la abogada, se observa a Mireles con una playera amarilla y con el rostro cubierto abordar con luz de día el helicóptero, en el cual es escoltado por agentes de la Policía Federal, hecho que supuestamente se registró en Lázaro Cárdenas al filo de las 17 horas.
Otra evidencia de la supuesta violación al debido proceso, es la versión de Mireles sobre su traslado, porque él relató que durante más de 4 horas permaneció en el helicóptero sobrevolando con los ojos cubiertos, y con el temor de que en cualquier momento podría ser lanzado desde el aire, lo que consiste un acto de tortura.
Circunstancia que advirtió la defensora violó las garantías procesales y el derecho que tiene toda persona implicada en la supuesta comisión de un delito de ser puesta a disposición del Ministerio Público de forma inmediata, máxime cuando se trata de un ilícito flagrante, como en el que supuestamente incurrieron Mireles y sus escoltas por portar armas de fuego y drogas, y ser sorprendidos por Ejército.