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MÉXICO, DF., 24 de enero de 2015.- El conflicto magisterial en Oaxaca no debe ser un botín durante el proceso electoral, por lo que es necesario que el gobierno de la entidad aplique una política de “cero tolerancia” para quienes violen la ley, a fin de que el problema educativo no produzca un estallido social de grandes proporciones capaz de desencadenar inestabilidad durante los próximos comicios, advirtió Hugo Eric Flores, presidente Nacional del Partido Encuentro Social (PES).
Según un comunicado, el dirigente de este instituto político hizo un llamado al Gobierno Federal para que actúe en la entidad, donde el clima de ingobernabilidad ya es insostenible.
Flores Cervantes propuso que ante este panorama, es imperativo que el Ejecutivo Estatal considere en presentar su renuncia al cargo pues sus acuerdos políticos para ganar las alecciones condenó a su estado a la ingobernabilidad permanente.
El gobernador de esta entidad, Gabino Cué, no ha sido incapaz de resolver el conflicto con los maestros de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), lo que pone en riesgo la estabilidad social y por ende el proceso electoral, enfatizó.
“No podemos mantener una actitud complaciente ante un problema que ha afectado la tranquilidad de los oaxaqueños y de quienes visitan la entidad debido a la falta de compromiso del Gobernador y de las autoridades federales de Educación para terminar con este conflicto”, puntualizó el dirigente del PES.
Flores Cervantes señaló que tras varias semanas de marchas, plantones, mítines y toma de casetas en las principales autopistas, que han provocado no sólo daños millonarios, bajas ventas en el comercio establecido, y cientos de horas perdidas para los alumnos oaxaqueños, este es el momento para actuar y dar respuesta a las demandas magisteriales y ciudadanas.
El Presidente del PES dijo que en estos momentos en que los grupos más radicales siguen operando en el Estado al amparo de algunos líderes corruptos, es indispensable que el gobierno de Gabino Cué, actúe para revertir esta situación.
Por último, sentenció que el gobierno oaxaqueño es el responsable de la seguridad en la entidad y de procurar la estabilidad durante el proceso electoral que ya está en marcha.