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MORELIA, Mich., 5 de junio de 2015.- El próximo 7 de junio, los michoacanos elegirán al gobernador número 56 de los últimos 100 años, de los cuales alrededor del 80 por ciento han sido interinos o sustitutos y de los que sólo seis pudieron concluir un periodo gubernamental de 6 años, lo que ubica a la entidad como uno de los estados con mayor inestabilidad política y social a nivel nacional.
Las pugnas políticas, conflictos sociales y reformas al vapor han sido los factores comunes en las diferentes etapas de la historia de Michoacán, que también es ubicada como el lugar que albergó a los exponentes de creencias e ideologías totalmente opuestas, provocando cruentas batallas, luchas sociales y principalmente inestabilidad en los gobiernos.
Para el historiador Arturo Herrera Cornejo, Michoacán siempre ha sido un estado con elevados niveles de inestabilidad que en la actualidad requiere poner énfasis en las coincidencias, más que en las diferencias como ya se ha registrado a lo largo de la historia y que ha llevado al estado a enfrentar las adversidades de hoy.
Incluso, debido a las pugnas políticas y conflictos sociales es difícil conocer el número exacto de gobernadores en Michoacán, ya que existieron periodos, como en el siglo 19, en los que cada grupo había erigido a su propio mandatario, algunos de los cuales ni siquiera aparecen en los libros de historia.
La historia detrás del gobernador número 56 que será electo el próximo domingo 7 de junio, comienza después de la Revolución Mexicana, con una lucha entre los seguidores de Francisco J. Múgica y los de Pascual Ortíz Rubio.
Francisco J. Múgica era el gobernador de Michoacán, pero dicha pugna le impide concluir su mandato un diputado local por Huetamo, quien fungió como interino y posteriormente le sucede Enrique Ramírez, quien en 1928 decide llegar al Senador y deja la gubernatura de Michoacán.
Llega Lázaro Cárdenas del Río pero es invitado a ser el secretario de Gobernación por el presidente Pascual Ortíz Rubio y se retira, quedando su hermano Dámaso Cárdenas como interino y quien fuera relevado en 1932 es Benigno Serrato, lo que genera una nueva pugna, pues el nuevo gobernador es identificado como anticardenista y combate a todo el grupo político de sus antecesores.
Benigno Serrato muere víctima de un “avionazo” y deja inconcluso su periodo gubernamental, mismo que asumió Rafael Sánchez Tapia interino.
Posteriormente, en 1936 en elecciones resulta triunfador Gildardo Magaña, brazo derecho de Emiliano Zapata, pero por aspirar a ser presidente de la República, deja la entidad para hacer pre campaña, por lo que ante la ausencia del mandatario llega Arnulfo Ávila de interino, quien no logra concluir y el Congreso designa a Conrado Magaña para que finalice el periodo.
De 1940 a 1944 Félix Ireta Viveros es gobernador y termina su periodo de cuatro años y tras reformas constitucionales llega el primer titular del Ejecutivo de 6 años, mismo que recayó en el nombre de José María Mendoza Pardo, pero que por conflictos con el Presidente y con la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) por la muerte de dos estudiantes a manos del Ejército sobre la avenida Madero, se ve obligado a renunciar.
Llega ahora Daniel Rentería a gobernar la entidad como interino, con perfil cardenista que también forma parte de la pugna entre Miguel Alemán y los cardenistas, dejando repercusiones en Michoacán.
Después de Daniel Rentería, llega Dámaso Cárdenas, el último militar que gobernó Michoacán.
David Franco Rodríguez resulta electo en 1956, hace las pases con la UMSNH y construye una serie de planteles educativos ubicados en la zona del Bosque Cuauhtémoc en Morelia.
Agustín Arriaga Rivera, asume el gobierno del estado contra la voluntad de Lázaro Cárdenas del Río, a quien intenta destituirse en 1963 debido a un nuevo conflicto con la UMSNH por la muerte de un estudiante, después se registra otro intento en 1966 pero con el apoyo del PRI, CNC, CTM y la CNOP se sostiene a pesar de decisión de quitarlo del presidente Gustavo Díaz Ordaz.
En 1968 asume Carlos Gálvez Betancourt pero se retira y llega Servando Chávez Hernández, interino, el primero se va invitado por Luis Echeverría como director del IMSS y luego secretario del Trabajo.
En 1974 hubo elecciones y llega Carlos Torres Manzo, terminó su periodo en 1980, asume Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y un nueva pugna al interior del Revolucionario Institucional derivando en una de las más marcadas etapas de inestabilidad en la entidad, con la llegada posterior de Luis Martínez Villicaña, quien así como Benigno Serrato, se dedicó a combatir el cardenismo.
Ante la insostenible situación de enfrentamiento en Michoacán, Villicaña es invitado por el presidente Carlos Salinas de Gortari a formar parte de su gabinete; llega Genovevo Figueroa Zamudio como interino, se celebran elecciones en 1992, en las que contienden Eduardo Villaseñor.
Asume Eduardo Villaseñor y la situación se complica aún más, ya que en medio de acusaciones de fraude electoral, crece la inestabilidad social y el nuevo gobernador solo duro 21 días en el mandato, dejando a Ausencio Chávez Hernández como interino quien relevado después de la elección de 1995 después de una reforma constitucional y en el 96 asume Víctor Manuel Tinoco Rubí quien es uno de los pocos gobernadores que logra concluir un periodo de 6 años
En las elecciones del 2001 regresan los Cárdenas al gobierno de Michoacán, con el triunfo de Lázaro Cárdenas Batel, pero nuevas reformas que se aprobaron con la fallida intención de hacer coincidentes las elecciones, genera dos periodos atípicos de gobierno.
El primero asumido por Leonel Godoy Rangel con una duración de cuatro años que logró concluir, y el segundo de tres años 7 meses y 15 días, encabezado por Fausto Vallejo, pero que ante la inestabilidad social que se reflejó en la aparición de autodefensas y sus condiciones de salud, le impidieron terminar su mandato.
Llego Jesús Reyna García como interino, después de un periodo de licencia médica al gobernador Fausto Vallejo, quien regresa a su encargo pero posteriormente se ve presionado a no concluir, motivo por el cual el Congreso designa al gobernador número 55 de los últimos 100 años, Salvador Jara Guerrero, ex rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.