MORELIA, Mich., 28 de enero de 2015.- La Comisión Permanente aprobó diez puntos de acuerdo de la Primera Comisión. Uno de ellos, exhorta a los titulares de la Secretaría de Gobernación y de la Procuraduría General de la República a que informen los resultados de las acciones implementadas por el gobierno federal ante el incremento de los índices de violencia en Michoacán, Guerrero y el Estado de México.
Según un comunicado de prensa, el documento resalta que la crudeza de los crímenes cometidos en estas tres entidades fue objeto de atención durante todo el año, lo que generó preocupación en el ámbito público y, principalmente, el diseño de operativos conjuntos que involucraron a las autoridades federales para abatirlos.
Señala que los niveles de violencia no disminuyeron pese a un número importante de acciones de los gobiernos de dichos estados y del gobierno federal, como la creación de la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral en Michoacán; el despliegue del operativo Guerrero Seguro, dependiente de la Secretaría de Gobernación, y el anuncio de la implementación de la estrategia de seguridad en el Estado de México, el 31 de marzo de 2014.
No obstante, precisa el punto de acuerdo, se presentó el caso de Tlatlaya, Estado de México, donde se dio la ejecución extrajudicial de 22 personas, presuntamente a manos de elementos del Ejército; en Guerrero aconteció la desaparición de los 43 normalistas de la Escuela Normal de Ayotzinapa, y en Michoacán el presunto enfrentamiento de las guardias comunitarias, armadas por el gobierno federal, provocó el deceso de 11 personas, el pasado 16 de diciembre.
Además, al iniciar el 2014 se dio a conocer la muerte de 17 reos en penales del Guerrero, cuyo resultado fue el arraigo de 24 custodios; en Michoacán, el enfrentamiento entre autodefensas y delincuentes pertenecientes a bandas del crimen organizado, y una serie de bloqueos a vías federales de comunicación, provocaron que el entonces gobernador Fausto Vallejo anunciara el cambio de estrategia en la Tierra Caliente.
En el Estado de México, continúa, se presentó el hallazgo de cadáveres en Nezahualcóyotl y Chalco, así como el incremento en el número de feminicidios, que provocaron la detención de al menos tres jefes policiales ligados al crimen organizado.