Desconfía de las instituciones, el 93% de jóvenes 

MORELIA, Mich., 5 de abril de 2016.-El presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano Grijalva, consideró preocupante la desconfianza que manifestaron hacia las instituciones, los dos millones 916 mil 686 de niñas, niños y adolescentes que participaron en la Consulta Infantil y Juvenil 2015, realizada por el Instituto Nacional Electoral (INE), en junio del año pasado.

Según un comunicado de prensa, al recibir los resultados de dicho ejercicio de manos del Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, el diputado Zambrano Grijalva indicó que si el informe presentado no se enfrenta con toda responsabilidad, puede ser un caldo de cultivo para que, en lugar de construir escenarios de civilidad democrática y fortalecimiento de instituciones, no se llegue a un buen fin.

De acuerdo con los resultados, dijo, nuestros niños y adolescentes expresan que “desconfían de las instituciones, actores políticos, y gobernantes, porque no cumplen lo que prometen. Es un fenómeno que nos debe preocupar a todos nosotros”.

Subrayó que si bien la Consulta no es una muestra estadística, sí es representativa de lo que dicen la niñez y la adolescencia y, por tanto, su contenido es de enorme valor.

Zambrano Grijalva enfatizó finalmente que la participación de casi tres millones de niñas, niños, adolescentes, mujeres y hombres, “no es peccata minuta, no es cualquier cosa”, por lo que se deberá estudiar a fondo el conjunto de elementos que contiene el informe, para tener las mejores conclusiones y forjar políticas públicas que, con presupuesto, ayuden a avanzar en la ruta hacia un mejor futuro para las siguientes generaciones.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Derechos de la Niñez, diputado Jesús Valencia Guzmán, consideró que es un foco rojo la desconfianza de los jóvenes hacia las instituciones, pues el 93 por ciento de los que tienen de 14 a 17 años de edad, dice no confiar en las instituciones ni en los partidos políticos. “La crudeza de esos datos nos llevan a preguntarnos qué acciones se deben realizar para revertir esa acción”, apuntó.

Refirió que la consulta efectuada por el INE “nos convoca a conocer y analizar sus resultados, para que cada quien, en el ámbito de sus responsabilidades, adopte medidas necesarias para generar confianza en las instituciones”.

Expresó que “este ejercicio donde, participaron alrededor de 3 millones de infantes y jóvenes, promueve su participación y derechos, pues expresan sus opiniones y propuestas respecto a la situación del país”.

Manifestó que los menores del país son terreno fértil para fortalecer la cultura de la legalidad y convocarlos a participar en tareas sociales, por lo que es importante diseñar políticas públicas para que asistan a la escuela y cuenten con opciones de desarrollo en su vida.

En su oportunidad, Lorenzo Córdova Vianello, indicó que para impulsar un futuro más democrático e influyente que el actual, es necesario empezar desde la niñez.

Explicó que las conclusiones obtenidas con la participación de 2.9 millones de niñas, niños y adolescentes, muestran que temas como inseguridad y desconfianza están presentes en su cotidianidad.

Ciertamente, sostuvo, en los 25 años de la transición hacia la democracia se ha logrado que la ruta electoral sea la principal vía para resolver conflictos políticos y distribuir los poderes públicos y, con ello, recrear el intenso pluralismo político de nuestra sociedad.

Dijo que en el INE se trabaja no sólo para estandarizar las condiciones en las que se recrea la competencia electoral en todo el territorio nacional, sino también para tratar de detonar un amplio debate nacional sobre la cultura cívica y contribuir al diseño de políticas públicas que apuntalen nuevas prácticas electorales y cívicas.

A su vez, el consejero electoral, Marco Antonio Baños Martínez, expuso que la Consulta 2015 fue la séptima edición del ejercicio que el INE realiza cada tres años, cuando se organizan elecciones federales.

En total, precisó, participaron 2 millones 916 mil 686 niñas, niños y adolescentes; de ese universo, 2 millones 677 mil 825 lo hicieron mediante boletas, lo que representa el 9.7 por ciento de la población nacional donde se ubica en este grupo; además, concurrieron 238 mil 861 niños y niñas menores de 6 años con alguna discapacidad o que no saben leer y escribir.

“Con los resultados de la consulta buscamos generar un proceso de socialización que permita construir sinergias entre las diversas instituciones del Estado para atender las demandas que las niñas, niños y adolescentes expresan”, refirió.

La Cámara de Diputados, junto con el Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, explicó, tienen un papel preponderante para articular las políticas públicas que, en el marco de la Ley General de Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, se emprendan para garantizar el respeto a los derechos de este segmento de la población, que serán los futuros ciudadanos.

Por su parte, la representante del Fondo para la Infancia de las Naciones Unidas (Unicef), Isabel Crowley, indicó que no se puede construir democracia sin considerar las opiniones de quienes son casi 40 millones de mexicanos: las niñas, niños y adolescentes.

“La consulta es un ejercicio que tiene peso y da pauta para saber qué piensa y preocupa a este sector. En Unicef esperamos que los resultados se conviertan en legislación, políticas públicas y presupuestos asignados”, apuntó.

Asimismo, se deben convertir en programas específicos para atender sus preocupaciones y lo que se considere necesario para respetar sus derechos. “Los legisladores tienen en sus manos la responsabilidad de que esas voces tengan eco y que las demandas que surgieron de este ejercicio de participación sean escuchadas”, apuntó.

Al término de la reunión, el presidente de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, y el titular del INE, Lorenzo Córdova, recorrieron la exposición de la Consulta Infantil y Juvenil 2015, montada en el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde se muestra parte de los 238 mil dibujos recibidos de niñas y niños menores de 6 años, quienes representaron gráficamente el lugar donde viven.