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ZITÁCUARO, MICH., 18 de abril de 2011.- Los grupos políticos al interior del Partido Revolucionario Institucional (PRI) no deben definir las candidaturas a la presidencia municipal ni a la diputación local para los comicios del 13 de noviembre próximo, afirmó el diputado Juan Carlos Campos Ponce.Entrevistado por Quadratín en sus oficinas de esta cabecera municipal y plenamente confiado en que la ciudadanía habrá de reconocer su esfuerzo como integrante de la LXXI Legislatura del Congreso del Estado, añade:Con el alcalde Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela he platicado varias veces, pero aún no llegamos a consensos plenos sobre varios temas municipales, convergencias –remarca- que serán necesarias para establecer una alianza de cara al proceso comicial para renovar el Solio de Ocampo, las 40 curules del Congreso y las 113 presidencias municipales.Siempre reivindicando su trabajo y a la espera de que sean la militancia y ciudadanía que simpatizan con el PRI las que jueguen un papel protagónico en la selección de candidatos a la alcaldía y diputación locales, añade que ya intercambió, también, puntos de vista con prominentes priístas como Cenobio Contreras e Ignacio Orihuela.“Para ningún zitacuarense es desconocida la importancia de ambos a la hora de cualquier proceso electoral, pero insisto en que deben ser los ciudadanos los que determinen cuáles son los mejores perfiles para los comicios del 13 de noviembre próximo”.En el transcurso de una entrevista de poco menos de 20 minutos, Campos Ponce nunca quita el dedo del renglón de su labor y gestión como integrante de la LXXI Legislatura local y cree que ello lo impulsará no sólo a la candidatura priista a la alcaldía, sino también a la Jefatura de la Comuna zitacuarense.“De un total de 17 iniciativas que he presentado, en días próximos el pleno camaral habrá de aprobar la séptima. Esos son resultados y no discursos”.El diputado toma aire cuando se le comenta que en el arranque de dicha legislatura y del gobierno municipal que preside Ixtláhuac Orihuela, fue un fuerte crítico de la gestión de este último, cuestionamientos que -por cierto- generaron descontento en las filas del priísmo local.Ante la pregunta de ¿cómo? se procesaron dichas diferencias, de manera tal que ahora busque el apoyo del joven edil para hacerse de la candidatura del PRI al mismo cargo en la jornada electoral que se avecina, Campos Ponce responde:“Mis críticas siempre fueron constructivas, particularmente en los temas de la voluminosa plantilla laboral del Ayuntamiento, de un gasto corriente alto y del impacto de ello en la obra pública”.El legislador matiza ahora los cuestionamientos con la afirmación de que el tema de la plantilla laboral del Ayuntamiento creció a partir de la administración del panista Carlos Cepeda y continuó con Silvano Aureoles Conejo y Leopoldo Martínez.Campos Ponce no se anima a realizar una evaluación de la administración de Ixtláhuac Orihuela y se limita a comentar que es la ciudadanía a la que le compete dicho examen.Dos temas en el que el diputado vuelve a tomar oxígeno y se extiende en sus argumentos, son su aprobación de una renegociación de la deuda solicitada por el gobierno que preside el perredista Leonel Godoy Rangel y su participación en el III Informe del gobernador, no obstante que los demás integrantes de la fracción tricolor no lo hicieron.“Dudo que ambos temas impacten en mis aspiraciones electorales, actué responsablemente y anteponiendo los intereses ciudadanos a los intereses de partido”.También sostiene que no aprobar la renegociación de la deuda habría llevado al Estado a la parálisis e insolvencias financieras. “Hice lo correcto y en este tema la mayoría de mis pares no se pusieron la camiseta del partido sino la de Michoacán”.En relación con su asistencia al III Informe de Gobierno de Godoy Rangel, Campos Ponce sostuvo que no existían argumentos para hacerle el vacío al mandatario estatal, “no se valía contaminar una rendición de cuentas porque algunos de mis compañeros no hicieron su tarea en el tema de las reformas electorales”.Otra vez Campos Ponce enarbola el tema de la ciudadanía para redondear su reflexión: que sea ella la que juzgue mi actuación.En la parte final de la conversación, se aborda el tema del llamado “michoacanazo” y del papel desempeñado por el legislador en todo ese proceso.Al igual que lo hiciera con otros medios locales y estatales, remarca: fue un asunto político, una operación fallida que no arrojó buenos dividendos al presidente Felipe Calderón Hinojosa.A renglón seguido, subraya: “no meto las manos al fuego por nadie de los 35 funcionarios que fueron encarcelados y luego liberados; sólo lo hago por mí y mi familia”.Campos Ponce concluye indicando que es poco probable que la Federación se embarque este año electoral en Michoacán en otro operativo policiaco-militar, y menciona que el 40 por ciento de los casos de los involucrados en el michoacanzo sigue abierto.“Creo que con el paso del tiempo y las acciones que emprendan los abogados estarán cerrados”.