Complaciente, gobierno de Michoacán ante pirataje en el transporte

MORELIA, Mich., 28 de septiembre de 2011.- Ha sido una constante en los gobiernos estatales emanados del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la complacencia y hasta el impulso al pirataje en el transporte público, aseveró el diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Trinidad Martínez Pasalagua, quien es además integrante de la Comisión de Transporte en el Congreso del Estado. Al respecto, el también dirigente estatal del Frente Auténtico de Transportistas del Estado de Michoacán (FATEM), la agrupación más numerosa de trabajadores del volante en la entidad, denunció que “rutas piratas” de combis circulan en Morelia y otros puntos del estado sin placas del transporte público, pero en cambio, con propaganda de Silvano Aureoles Conejo, candidato de PRD, Partido del Trabajo (PT) y Convergencia a la gubernatura estatal. Martínez Pasalagua indicó que no puede ser que una autoridad estatal seria y responsable tolere y se convierta en cómplice de esas actitudes de querer sustituir las placas y la documentación legal que los convertiría en concesionarios con la publicidad de campaña del candidato del gobierno estatal en turno. El también presidente de la Comisión de Desarrollo Social del Congreso del Estado aseguró que existen evidencias documentales de las irregularidades en las que han incurrido los gobiernos perredistas encabezados por Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel, incluso de que recientemente, y al margen de la legalidad se comprometió el cambio de modalidad del servicio urbano al colectivo, en pleno tiempo electoral. “Han pretendido meter a ruta nuevas unidades de colectivo sin emplacar y sólo con las calcomanías de Silvano Aureoles, candidato a la gubernatura de Michoacán por el partido en el poder”, expresó. Martínez Pasalagua insistió en señalar que la compra de votos a cambio de concesiones ha sido también una constante en los gobiernos emanados del PRD, donde ni los funcionarios encargados de la Comisión Coordinadora del Transporte (Cocotra) ni los secretarios de Gobierno se han ocupado de atender los problemas de los trabajadores del volante y, por el contrario, han contribuido a su agudización.