Se compromete Mónica Valdez a ejercer recursos públicos sin corrupción
MORELIA, Mich., 30 de diciembre de 2014.- A pesar del elevado costo en la renta del edificio del Comité Estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el cual asciende a la cantidad de 50 mil 263 pesos mensuales, las condiciones y mantenimiento del mismo presentan varias deficiencias, principalmente en el salón de ruedas de prensa, y en el auditorio Ingeniero Heberto Castillo, situado en el mismo edificio.
El edificio, desde su exterior, evidencia las condiciones deplorables del Comité, debido a que la pintura desgastada, y las viejas puertas de acceso, permiten apreciar rápidamente la falta de mantenimiento de la casa perredista.
Dentro del salón de ruedas de prensa, es notorio el deterioro y la falta de manutención, donde el gremio periodístico es el principal afectado, ya que al acudir cada lunes, al tradicional pronunciamiento del dirigente estatal perredista, Calos Torres Piña, el espacio resulta ser un problema, ya que los reporteros gráficos abarcan la mayor parte de este, dejando al reportero a la deriva, con complicaciones para apreciar la información, y muchas veces de pie, ante un agobiante calor mientras la dirigencia del PRD emite la información del día.
En el caso del Auditorio Ingeniero Heberto Castillo, la situación en cuanto al espacio no es un problema, ya que podría llamarse más que auditorio, un estacionamiento adaptado para realizar las reuniones del Consejo Estatal y, en este caso, a parte de la prensa, los consejeros amarillos resultan también afectados, ya que al no existir aire acondicionado, o por lo menos vías de acceso al aire libre, el tiempo ahí dentro resulta tedioso, mientras aumenta el calor humano conforme se va incorporando más gente al interior.
Respecto a las oficinas del personal que ahí labora, las condiciones no mejoran, ya que se pueden apreciar paredes manchadas, puertas desgastadas, e inmuebles viejos, los cuales sirven como herramienta diaria para el equipo de trabajo de partido.
Un reflejo de la falta de mantenimiento que recibe el edificio, es que tras la irrupción de normalistas al Comité perredista, en el mes de noviembre, aún se pueden apreciar daños ocasionados por el arribo de los estudiantes (a más de un mes de haberse realizado la acción antes referida).
Ante estas circunstancias, es preocupante ver como los partidos políticos gastan exorbitantemente en rentas y servicios de sus instalaciones, utilizando el erario público con falta de responsabilidad y administración de este.