Amnistía directa: patente de corso
VISIONES Y PERCEPCIONES
ACTIVISMO DE SILVANO AUREOLES
¿RAZÓN DE ESTADO O RAZÓNES PERSONALES DE PROTECCIÓN?
Para casi nadie en nuestro estado, y en buena parte del país es desconocido el banquito de plástico, color verde utilizado por el gobernador de nuestro estado en su hasta el momento infructuosa gestión ante al titular del Ejecutivo federal, para que, atendiendo el espíritu y letras de sus palabras le presentara pruebas de la participación=intromisión en el recientemente pasado proceso electoral – que ya cumplirá 2 meses el 6 del presente, de la llamada delincuencia organizada.Como se sabe no fue recibido, pese a todo lo que, en términos de comunicación, propaganda y publicidad, buena o mala, se generó para ambos protagonistas políticos; después de hacer antesala en varias oficinas fue recibido en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y por el fiscal general de la República y por el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral; en todas las instancias dejó—entregó las carpetas que contenían pruebas de su dicho y en cada caso, ninguna instancia informó del resultado de dichas gestiones.La siguiente etapa de su gestión fue acudir a Estados Unidos, en donde fue recibido por instituciones federales y por autoridades intermedias de la administración Biden; igualmente tuvo encuentros con grupos organizados de paisano que trabajan y radican en ese país; una de sus últimas gestiones fue ser recibido por el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos – la OEA -, JOSÉ Luis Almagro, organización multilateral regional y autoridad que no tiene aceptación ni es muy vista por nuestro presidente de la República, quien está demandando que desaparezca esta organización multilateral.Por supuesto que este activismo del titular de Ejecutivo de nuestro estado tiene una o varias finalidades, que son totalmente desconocidas por la sociedad nacional y estatal, particularmente. Se da por aceptado que Silvano Aureoles Conejo no es ningún tonto y que lo que promueve es algo anhelado, buscado y deseado por él.Pero ¿Qué es o qué son?Se da por descontado que no es revertir o anular el resultado electoral de nuestro estado. Somos una sociedad de instituciones y ese hecho, la anulación del resultado electoral y/o reponer el proceso electoral, como posibilidad lo es, mas, ¿qué tan probable es? Es realmente improbable que sea.
Por otro lado, si realmente fuera eso lo que buscara, debió orientar sus gestiones y presentarlas en los ascendentes escalones del Instituto Electoral, empezando por los organismos electorales estatales, el Instituto Nacional Electoral y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en sus diferentes salas, hasta llegar a la sala Superior. Por lo difundido no fue así. ¿Cómo iba a mostrar-demostrar la injerencia, intromisión, participación de la delincuencia organizada en el proceso, en casillas, en las campañas, en las finanzas en la mayoría de, territorialmente hablando, del estado nuestro?
¿Qué obtendría-conseguiría de las reuniones con las organizaciones de paisanos? En términos de fuerza para revertir el resultado electoral. Nada, ningún resultado. ¿Entonces a qué fue? Otro, mostrar la imagen de celoso guardián y defensor de la democracia y de la honestidad y transparencia electorales… ¡Por favor!¿Buscará victimizarse y sembrar la idea de que es/será perseguido político?Desde la perspectiva de la política internacional, latinoamericana, específicamente, tampoco puede logar un punto a su favor. La política internacional la marca el senado de la República y la pone en operación el presidente de la República. Como titular del Ejecutivo de un estado carece de fuerza política y económica para incidir algo, en la política regional, ni siquiera como estado productor de enervantes, algo así como Sinaloa, Colima, Sonora y Guerrero; si se formara una coalición de las familias, de los grupos delictivos de esos estados, tal vez, pero ni en Colombia, ni en Bolivia ha surgido o manifestado una idea como esa.Es realmente imposible que Almagro o la OEA de “motu proprio” vaya a realizar y difundir nota diplomática sobre este hecho; necesitaría el consenso de la mitad más uno de los miembros de la organización – OEA – y, fundamentalmente, de Estados Unidos.Complementariamente, la OEA carece de fuerza militar, ni prestigio en valores humanos, ni nada de eso…deja hacer y deja pasar…así que… ¿A qué fue a la Organización de los Estados Unidos? ¿A desprestigiar al estado mexicano? ¡A deslavar, a ensuciar, manchar y rayar una raya más al Tigre, a demeritar aun más la imagen de nuestro titular del Ejecutivo? Eso no le importa a Andrés Manuel López Obrador.Cuando regrese, porque debe regresar – se supone – tendrá menos de sesenta días para la entrega de la administración y que la alternancia sea sedosa, planchadita, tersa, si no brillante, sí laxa y arreglar “sus asuntos”.Está señalado como irresponsable y acaso son pocas voces que demandan juicio político para él y, otras, que lo señalan como traidor a la patria, si bien esta voz tiene poca posibilidad y muchísima menos probabilidad de que sea – pues al presidente de la República es el único funcionario que representa a la patria – considerado traidor a la patria, si le puede armar todo un escenario no deseado para que se le configure juicio político.Deja todo colgado: la crisis sanitaria generada por la pandemia COVID-19 cuyos estragos van en ascenso, la crisis de seguridad en todo el estado, específicamente en Aguililla, y en toda la Tierra Caliente y la violencia en lo general y en lo específico la violencia de género y la infantes, los escenarios generado por el capricho presidencial, con amenaza y todo, de regresar a clases presenciales el 30 del inminente agosto, la definición de la elección del pasado 6 de junio, etc., y toma su banquito verde.Nuestra administración – de los 3 niveles de gobierno – no es un componente automotriz, ni electrónico; es una estructura administrativa viva, dinámica, no un cuerpo que trabaja por inercia. Al titular del Ejecutivo estatal debe, o llamársele la atención, y por escrito, señalársele su irresponsabilidad, su mínima moralidad administrativa, sus nulos valores de respeto a lo que es Michoacán o conformarle juicio político.