Falacias circulares ¿Tú crees que México va bien?

Por Jorge Octavio Ochoa.- Todo, en el arranque de ésta 4T, ha sido opacidad y simulación. Tenemos a la vista un catálogo de buenas intenciones, sazonado con pretensiones de corte socialista, de un gobierno que se dice “de izquierda” pero en el que muchos ven las recetas que alguna vez cocinó el viejo PRI.

Para empezar, el programa estelar “Sembrando Vidas” es, en opinión de los especialistas, un auténtico mar de oscuridad pues resulta más fácil ver a Dios que encontrar la lista de beneficiarios a los que reparte millonadas en efectivo porque el Banco del Bienestar simplemente no funciona.

Lo mismo ocurre con el programa de Pensión para Adultos Mayores en el que, si bien existe lista con nombres, muchos de ellos ni siquiera necesitan ese recurso porque no pertenecen al mundo de la pobreza. Aún así, la 4T reparte dinero en efectivo.

¡Bueno, el colmo! Tenemos a los llamados “Servidores de la Nación”, los que se encargan de levantar el censo de las personas beneficiarias de los programas sociales de AMLO. Pues resulta que esos 19 mil emisarios de la buena nueva del Señor, ¡no tienen segura la chamba!

Ahora nos enteramos de que todos ellos trabajan sin que su puesto y salario tengan un sustento jurídico, según nota de EL UNIVERSAL. A estos 19 mil buenos hombres y mujeres que tocan de puerta en puerta, con chalequitos de color MORENA, les pagan 10 mil mensuales en contratos por honorarios cada mes.

Se llama POPULISMO y es, aunque usted no lo crea, la descripción tragicómica de tan sólo uno de los proyectos más importantes del actual régimen, acompasado con el desmantelamiento de otros programas e incluso de instituciones como el Seguro Popular.

Así va la entronización del nuevo régimen, con una serie de medidas impositivas en lo político, religioso, económico y social, que prepara la reparación del desastre de un año perdido, con medidas draconianas para sembrar ese ambiente de terror que, por arte de magia, resolverán el próximo año.   

En el 2019, AMLO se empeñó en mantener un subejercicio presupuestal superior al 70%, que hundió al país en la recesión que actualmente vive, manteniendo un reparto del presupuesto centralista que curiosamente beneficia más a los estados del sureste, principalmente Tabasco y Chiapas.

Los datos son públicos y publicados: La política de gasto del Presidente López Obrador, fue una de las principales causas de la atonía financiera:

A Petróleos Mexicanos (Pemex) se le asignaron 271,656 millones de pesos para invertir en obras para el 2019; al término de octubre, sólo había licitado contratos por 76,153 millones de pesos, equivalentes a 28% del total para el año.

Para la Comisión Federal de Electricidad (CFE), fueron 41,460 millones, de los cuales sólo ha licitado 8,501millones de pesos, 20.5 por ciento.

En el caso de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las licitaciones suman 1,401 millones, 16% de un presupuesto asignado de 8,526 millones de pesos.

Todo es contracción, parte de una antigua receta de crear el caos y un gran problema, culpando a los gobiernos “conservadores” del pasado, para luego entrar como el Cid Campeador y resolver los entuertos mediante el reparto de mendrugos.

Sin embargo las paradojas siguen ahí: se empeña en pintar su raya de anteriores gobiernos, aunque varios de los cerebros de la “Mafia del Poder” ya se encuentran enquistados y quizá los veamos juntos en el Teletón.

Denuesta contra el “conservadurismo” y las políticas neoliberales, pero el eje de las preocupaciones de AMLO es la firma del TMEC que en su origen, cuando nació como TLC, fue repudiado entonces por la izquierda mexicana, porque veían que sólo beneficiaba al gran capital.

Quizá por eso Cuauhtémoc Cárdenas le reprocha veladamente a López Obrador el no ser auténticamente un gobierno de izquierda, por toda esta serie de incongruencias, que llegan a un extremo esquizofrénico cuando habla del aumento de las remesas de mexicanos en el extranjero, fundamentalmente en USA.

Si hay más remesas, es sólo indicativo de que ha crecido la falta de oportunidades en México y cada vez son más los compatriotas los que buscan huir de su tierra para ver qué encuentran allende el norte, so riesgo de su propia vida y de no volver a ver a sus familias.

Cualquier cosa es mejor antes que seguir hundidos en la miseria y ahora en la violencia, porque grupos armados controlan el territorio y ni la Guardia Nacional es capaz de imponer el orden, porque la confusión es tal, que ya no sabemos quienes son “autodefensas” y quiénes son cárteles del crimen organizado

¿En serio vamos bien señor Presidente? Muchos pensamos que NO