“Espionaje del Gobierno y el Ejército”

La noticia del lunes fue el reportaje del NYT respecto al espionaje del gobierno Federal en contra de periodistas y comunicadores.

R- Guau, mi Santias, ¿y tú qué piensas?

S- Creo que los del gobierno lo hacen para no comprar el periódico, mi Rufo, de otra manera ¿qué sentido tiene espiar a quienes publican sus opiniones o ladridos?, como es tu caso.

R- Grrr, yo creo que va más allá e incluye el conocer asuntos personales para chantajear a los comunicadores o anticiparse a las notas para bloquearlas o peor aún, conocer fuentes y de plano atacar a quienes les representan un peligro por exhibirlos en sus corruptelas; no de gratis, hoy, el periodista tiene la vida pendiendo de un hilo ante el silencio ciudadano y el mutismo e inacción burocrática de las instituciones de investigación y justicia respecto a las agresiones y asesinatos de muchos compañeros.

S- ¡Tienes razón, perro!, por eso, con tino, el periodista Jorge Ramos cuestiona la tibia respuesta de medios y comunicadores mexicanos ante algo tan grave como el cometer delitos desde la mismita presidencia de la República y quedar impune. Hoy todos deberíamos ser una sola voz cuestionando el actuar del gobierno, pidiendo renuncias y exigiendo a las instituciones que se aplique la Ley, caiga quién caiga.

R- ¡Guauuu, mi Santias!, te comparto, el tema se viralizó y no solo el “New York Times” (NYT) escribió sobre ello: En “El País”, uno de los periódicos más importantes de España escriben: “Según explica R3D, “Pegasus es un sofisticado malware de vigilancia que solamente puede ser comercializado a gobiernos. En los últimos años, se ha reunido evidencia de que al menos tres instancias del gobierno federal lo han adquirido: la Procuraduría General de la República (PGR), el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y la Secretaría de la Defensa Nacional; esta última, sin facultades legales para ejercer acciones de vigilancia”, añade la organización.” Imagínate la gravedad del asunto, el Ejército, de mutuo propio con el aval del Presidente como Comandante Supremo, delinque flagrantemente en contra de las libertades y derechos de los mexicanos. Por ello los diputados y senadores, deben detener el bodrio que es la Ley de Seguridad Interior que prostituye e las Fuerzas Armadas al convertirlas en policías y ponerlas en contacto con la pudrición “narca”, la descomposición política y la corrupción del crimen organizado, con lo que se atenta contra la seguridad nacional ya que el ejército deja de hacer lo constitucionalmente le corresponde, para hacer la tarea que ni el gobierno federal ni los estatales asumen: Garantizar la seguridad, la paz y castigar a quienes cometen delitos.

S- ¿Cómo esperas que el gobierno castigue a quienes delinquen si claramente se ve que tienen las manitas metidas en las ganancias ilícitas, ya sea para financiar campañas, ya sea para llenarse los bolsillos y los de la parentela como nos enseñaron, salvo honrosas excepciones los huachicoleros, los directores de Pemex y los gobernadores priistas de Veracruz, Nuevo León, Chihuahua y Quintana Roo, más los perredistas encabezados por Marcelo Ebrard y alguno que otro azul como Yunes, Padrés y Sergio Estrada Cajigal, pasando por los todavía no procesados como Manuel Velasco Coello el niño verde chiapaneco y los híbridos azul con amarillo cuya representación más acabada de raterías es el exgobernador oaxaqueño, no, no me refiero a Murat, aunque en mi opinión califica, me refiero a Gabino Cue.

R- Auuu, no sigas, mi ínclito humano que me estas derramando la bilis, y es que tienes razón, si el ejército delinque, el gobierno federal lo avala y delinque también y la mayorías de los gobernadores incluyendo a muchos presidentes municipales son ratas, ya entiendo el ¿por qué? de los índices de inseguridad y criminalidad, y por que México va rumbo al precipicio y la dependencia de los gringos.

S- Lo realmente grave, mi estimado can, es que sabiendo de la ilegalidad del espionaje del gobierno federal, más los abusos y raterías de los gobiernos estatales y municipales, solo pocos, los que no convienen al régimen serán castigados, por una sencilla razón; los mexicanos somos, como bien describió el maestro Rius: ¡Supermachos!, por eso aguantamos más injusticias y abusos que los simplemente machos, además de apáticos, cobardes, acomodaticios, convenencieros y desorganizados. Así de que acostumbrémonos, ya que seguiremos siendo espiados por quienes juraron honrar la Constitución y hacer cumplir las leyes (…para su beneficio)… ¡Así de sencillo!

Un saludo, una reflexión.

 

Santiago Heyser Beltrán

Escritor y soñador