Poder y dinero
Prendiendo Luces para atender el duelo.
Gerardo A. Herrera Pérez
Diversas organizaciones de la sociedad civil se han integrado respetando el marco jurídico de promoción y fortalecimiento de las organizaciones de la sociedad civil tanto federal como local para darle viabilidad a los objetivos sociales con que son formalizadas.
Así, diversas temáticas y múltiples propósitos animan a la sociedad civil a organizarse para promover actividades que permitan mejorar la calidad de vida de la población y en general de los seres vivos.
Y es que en este momento, la población vive dramáticas situaciones de violencia y sus variantes, dicha violencia en ocasiones arrebatan la vida de seres queridos; por lo que continua siendo una preocupación permanente la violencia en que se vive, pero también de agravio, dolor, incluso de frustración por parte de las víctimas directas y de sus familiares, quienes además de resentir las agresiones en su vida y en su familia, pueden ser objeto de revictimización frente a servidores públicos no sensibilizados.
Entre los temas que han generado un mayor acercamiento desde diferentes disciplinas para atender las problemáticas de la vida moderna, encontramos los relacionados con valores y principios; la sororidad; la resilencia; la tanatología, el duelo y otros temas afines que son fundamentales como: la inteligencia emocional.
En este contexto de mucha tensión social derivado de la violencia, y para ofrecer servicios de contención y atención para el desarrollo humano a la población, fue diseñada la organización de la sociedad civil “Prendiendo Luces” asociación civil, cuyo ámbito de trabajo es de dimensión internacional con representación en Suecia y los Estados Unidos y cuya sede se localiza en la Capital de Michoacán, Morelia.
Prendiendo Luces a través de su personal calificado, brinda apoyo psicológico, utilizando herramientas modernas, las cuales ya fueron probadas y que ahora por conducto de protocolos de intervención terapéutico certificado, pueden ser utilizadas para la atención de personas víctimas de delitos de alto impacto que estén en una etapa de duelo.
Aquellos niños, niñas o adolescentes, incluso los jóvenes, adultos o adultos mayores requieren de un tratamiento profesional cuando un ser querido se le arrebato la vida de manera violenta, o bien se encuentra desaparecido, o fue secuestrado y eso genere pensamientos tóxicos que agraven su situación emocional y opten por acciones de efectos contrarios a un desarrollo armónico en su beneficio, o bien, que puedan tomar un rumbo que a futuro los dañe a ellos o a su entorno.
Los recursos humanos que integran la organización, son resultado de un proceso de formación y capacitación que responde a las necesidades y expectativas de aquellos que viven en desesperación, dolor, coraje, frustración y que derivado de ello requieren de un tratamiento profesional especializado.
De esta manera podemos observar como un gran número de organizaciones de la sociedad civil se profesionalizan para brindar un servicio de calidad, de calidez y de atención con visión humanista y previendo siempre realizar sus acciones en el marco del respeto a la dignidad humana de la población.