*EL PODER TRANSFORMA

Hay personas que luchan para transformar la aplicación del poder, pero hay otros a los que el poder los transforma y lo aplican. Usted lector ubique cuál de estos trajes le queda al líder nacional de los mineros, Napoleón Gómez Urrutia, también senador de la República.

El próximo viernes se cumplirán 13 años del fallido desalojo de los mineros en cuya refriega murieron dos jóvenes obreros, hubo decenas de heridos y dejó una imborrable marca en la historia de nuestro municipio.

Creí que la huella principal sería entre los mineros de la Sección 271. Lamentablemente eso está en duda. Su líder nacional tiene el poder para cambiar las fechas de esa amarga historia.

Nadie puede olvidar que la tragedia ocurrió el 20 de abril, aquella vez fue jueves y de ahí se le marcó como “El Jueves Negro”.

El paro y toma de los accesos de Sicartsa ya duraban 18 días. 

El fondo del conflicto no era directamente con la administración y dueños de la entonces Sicartsa, los hermanos Pablo y Sergio Villarreal Guajardo.

El problema era contra Vicente Fox Quesada al que le demandaban reconociera a Napoleón Gómez Urrutia como líder nacional de los mineros. Lázaro Cárdenas Batel era el gobernador de Michoacán.

La mañana de aquel trágico jueves el gobierno de Fox dio la orden del uso de la fuerza para desalojar a los mineros. Le acompañó en esa determinación el gobernador Lázaro Cárdenas Batel conviniendo la participación de sus ministeriales.

El resultado final dos mineros muertos a la vista, el desalojo no pudo ser concretado y unos días después, grupo Villacero tuvo que traspasar sus acciones al consorcio ArcelorMittal.

Pese a esos hechos, lejos de que Fox reconociera al líder minero, ordenó su persecución y este fue a parar a Canadá quedando refugiado  durante doce años hasta volver a México el año pasado convertido en Senador por Morena.

Desde el exterior Gómez Urrutia dio una y mil batallas contra los gobiernos de Fox, Felipe y Peña Nieto.

Ni quien discuta las hazañas de Napoleón y sus mineros que, lejos de mermar, hicieron aumentar la membresía y el poder sindical y político del gremio y de su líder.

Al cumplirse este viernes el 13 aniversario del jueves negro, para el líder Napoleón será el primer evento que presida y aquí nace el cambio de la historia gracias al poder que todo lo transforma.

Pero resulta que el 13 aniversario luctuoso de los mineros muertos Héctor Álvarez Gómez y Mario Alberto Castillo no será el 19 de este mes como les corresponde, sino este miércoles 17 porque así lo dispuso el poderoso líder.

Esta fecha, el 17 de abril, empata con los planes para constituir y será aquí la primera asamblea de la Confederación Internacional de Sindicatos que ya preside el dirigente minero.

 Los testigos y primeros afiliados serán los diferentes gremios extranjeros que año con año han sido solidarios con los mineros y que estarán presentes para alzar la mano a Napoleón Gómez Urrutia.

A segundo plano pasan los mártires y aquel fatídico jueves negro.

No hay duda de que los dirigentes mineros habrán de ufanarse y aplaudir todo lo que diga su máximo líder, pero no se confundan, hay entre los agremiados quienes no están tan convencidos de que torcer la historia sea lo correcto.

¿Y los reclamos de justicia con los responsables de la masacre? ¿Ya no exigen que se abra el expediente negro y se castigue a los culpables de la barbarie?

EL PODER LOS UNE

Napoleón Gómez Urrutia es ahora oficialmente reconocido como dirigente de los mineros, es también ahora senador de la República y está por asumir el liderazgo de un nuevo gremio internacional.

Por el otro lado, también está encumbrado como jefe de asesores del presidente de la República el que fuera gobernador de Michoacán, Lázaro Cárdenas Batel, señalado como principal responsable del ataque armado a los mineros aquel jueves negro.

 Por cierto, al señor Urrutia le agradecen les haya cambiado la historia a tres mineros de Fertinal injustamente sancionados. Ya encarrerados y al fin que sí se puede, que haga lo propio con otros injustamente sancionados de la 271. HASTA LA VISTA