Este mes sin duda alguna para los mexicanos es el más importante, septiembre, mes patrio, pero en realidad y en la practicidad los mexicanos honramos a la patria y lo que ésta representa.
La patria es amor, pasión, cultura, identidad, historia, tradición, sacrificio, sufrimiento, orgullo. Hablar de ella es más que un ejercicio dialectico, implica una aproximación a la identidad que nos forma desde pequeños la enseñanza cívica comienza a formar nuestra identidad mediante símbolos o representaciones que nos dan una idea de pertenencia, unidad y solidaridad, símbolos como la Bandera, el Himno y el Escudo Nacional, son los elementos a través de los cuales tenemos la primera aproximación y que nos identifican como mexicanos, únicos y reconocibles entre compatriotas y nos hace únicos en todo el mundo.
La historia de nuestro país ha ido transformando la Bandera Nacional, siempre presente en lo más alto, ya sea en momentos gratos o desagradables, en los éxitos pero también en las derrotas, desde 1821 los colores nacionales han estado presentes, identificándonos como un pueblo independiente, lleno de esperanza, unido y a su vez lacerado, pero con un gran presente y futuro.
El Escudo Nacional representa al conjunto de estados que formamos la República Mexicana, empezó a expresarse en el periodo prehispánico con la leyenda de Tenochtitlan, que ya todos conocemos, en 1541 surge la primera representación realizada por los Tlacuilos, artistas indígenas y así hasta nuestra actualidad ha ido modificándose, representándose en diferentes etapas de nuestra historia como son la época virreinal, en el imperio mexicano, en la época de Maximiliano, Porfirista, y lo que hoy tenemos se traduce a la época contemporánea y moderna.
En 1934 se realizaron políticas públicas para impulsar el culto hacia la Bandera Nacional, oficializando el abanderamiento en instituciones civiles, así mismo a las autoridades educativas del país les correspondía realizar ceremonias para rendir honores, todo esto bajo el mandato del Presidente en turno el General Lázaro Cárdenas del Río.
Francisco González Bocanegra, con tan solo 29 años de edad, fue quien escribió las diez estrofas de nuestro Himno Nacional, Jaime Nunó Roca, de descendencia española fue quien trabajo y elaboró la música, el 15 de septiembre de 1854 se interpretó por primera vez. Tras el plan de Ayutla, el Himno dejó de escucharse, en su lugar se interpretaba la Marcha Zaragoza. Hasta la llegada del General Porfirio Díaz el Himno retomó y logró arraigarse a nivel oficial y popular, en la época actual cada que escuchamos esta majestuosa pieza musical, catalogada como la segunda más hermosa del mundo, nos sentimos identificados y plenos de ser un país libre y soberano.
En 1934 se expidió la Ley sobre las características y uso del Escudo, la Bandera y el Himno Nacional, en la cual se menciona que cada 24 de febrero se celebre oficialmente el Día de la Bandera Mexicana,esta norma jurídica blinda el uso indebido de los mismos, al no poder usarse de la manera en que mejor nos parezca.
Es por estas y muchas más razones, que hago un llamado emergente a nuestros representantes, de los tres órdenes de gobierno y al pueblo mexicano en general, a que siempre pongamos de relieve la patria y nuestros símbolos de identidad nacional, ya que la historia marca un precedente importante respecto al tema, antes de incurrir en acciones como son la corrupción, el crimen organizado aquellas que atenten en contra de los derechos humanos y de la estabilidad nacional,las cuales perjudican el desarrollo y el progreso de nuestro país.