De los años 90 para acá, ante la pérdida de hegemonía del PRI, 3 partidos políticos han dominado en mayor o menor grado el espectro político nacional, estos son el ya referido PRI, el PAN y el PRD, calificándolossubjetivamentecomo partidos grandes yseñalandoal resto de los partidos que han convivido electoralmente con ellos como partidos pequeños. Esta situación en los últimos años se ha desdibujado por el crecimiento de unos y el decrecimiento de otros; surgiendo nuevas tallas o tamaños de partidos: grande, mediano y pequeño.
Hoy día los tres grandes partidos han sufrido significativas mermas en sus porcentajes de votación, pero aun así se mantienen, a nivel nacional, como los 3 primeros lugares en las preferencias electorales.El que más se ha visto disminuido es el PRD, ello a raíz del surgimiento de MORENA, quien en un lapso corto ha dado muestra de ser más que un partido pequeño.
Lo anterior nos lleva a señalar que en la actualidad, a nivel nacional,solo quedan dos partidos grandes, el PRI y el PAN, surgiendo el tamaño mediano, que son: el PRD (a pesar de ser grande en diversos estados como Michoacán), el PVEM y MORENA. Hoy día los pequeños,o la chiquillada como en algún momento se les ha llamado,son: Movimiento Ciudadano (caso de excepción Jalisco), el PANAL, el PT y el PES.
Como michoacanos debemos subrayar el caso del PRD, toda vez que en nuestro estado desde su fundación (1989) ha sido actor importante de amplia penetración electoral, habiendo resultado victorioso en 3 de las 6 elecciones para gobernador que ha disputado (2001, 2007 y 2015), por lo que en nuestro espectro debemos considerarlo un partido grande, sin embargo, a nivel nacional en importante cantidad de estados, sobre todo hacia el norte del país, su presencia es testimonial.
En otro orden de ideas, es difícil señalar si esta fragmentación política es benéfica o no para el desarrollo político del país; en teoría abona a una mayor representación de la ciudadanía que no encuentra cabida en los partidos tradicionales;pro que es severamente cuestionado porla forma empresarial, antidemocrática y poco clara en que se manejan varios de los partidos medianos y pequeños, que suelen representar interés particulares muy evidentes.
Esta atomizaciónpudiera evitarse ampliando el umbral legal para mantener el registro como partido, que hoy día es de 3%,pasandoloa un mínimo de 5%, lo que de un brochazo para el próximo proceso electoral probablemente eliminaría a 2 o 3 partidos pequeños.Ahora bien, el beneficio seria si esto se traduce en un ahorro y no en que los recursos de estos se repartan en los subsistentes.
De elevarse el umbral al 5 %, posiblemente regresaríamos a tener solo dos tamaños de partidos, los grandes que van camino a ser medianos y los medianos que serían los pequeños, pero que no les gustaría ser llamados así, lo que nos llevaría,para ser políticamente correctos, a tener tamaños tipo cafetería transnacional, en la que el alto es el chico, el grande el mediano, etc.; bastante confuso para un servidor.
En fin, como dijo sir Winston Churchill: “La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre. Con excepción de todos los demás”.
OTRO SI: Medalla Belisario Domínguez para Gonzalo Rivas. Héroe de Chilpancingo.