Presidenta, ¿y luego?
Seguridad, tema compartido.
Michoacán está por cumplir diez años de que experimentó la estrategia de seguridad del entonces presidente, Felipe Calderón Hinojosa, un despliegue de ocho mil elementos del Ejército Mexicano en Tierra Caliente parecía que era la solución, sin embargo, no fue así, posteriormente, Enrique Peña Nieto, manda un comisionado especial y tampoco dio resultados esperados.
Resulta inverosímil ver las acusaciones de algunos actores políticos, específicamente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), de Michoacán, al atribuir, sin argumentos reales la estrategia de seguridad emprendida en el estado, la cual ha sido desde hace diez años orquestada desde el Gobierno Federal, en estos momentos a cargo de Peña Nieto máximo líder priísta.
Habrá que recordar que en 2014, Enrique Peña Nieto, manda a uno de sus más cercanos colaboradores a coordinar los trabajos de seguridad a un estado plagado de grupos de autodefensa que en su momento luchaban contra líderes delincuenciales, es de reconocer que a dos años y medio de tal estrategia las instituciones encargadas de brindar seguridad están fortalecidas, ya que en su momento estaban infiltradas por el crimen organizado.
Actualmente desapareció la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, sin embargo, la estrategia sigue a cargo de la Federación, ahora encabezada por un militar, el general Gurrola, quién además ha tenido un papel importante por ser el encargado de coordinar a las fuerzas federales que se encuentran en la entidad.
A pesar de tener un perfil bajo, sobre Gurrola recae gran parte de las acciones que emprende el Gobierno Federal en materia de seguridad, fue así que ha sido fundamental para en su momento atrapar a Servando Gómez Martínez alías “La Tuta” y otros líderes delincuenciales que tenían peso en el estado.
Silvano Aureoles ha aceptado la estrategia que se impuso desde la Federación, y es tal la coordinación, que el general Gurrola, es uno de los principales asesores del gobernador para las decisiones que corresponden a las instituciones estatales de seguridad.
Hace unos días, algunos actores priístas levantaron la voz, hicieron señalamientos contra las acciones emprendidas en la entidad, fue tal, que señalaron directamente al gobernador, cuando los delitos de alto impacto le corresponde atender al Ejecutivo Federal, emanado de su mismo partido político.
Gurrola ha dado resultados en Michoacán, es un militar con capacidad política, en vídeos filtrados en redes sociales se le ve consensuando con personas que querían acercarse a Aureoles, pero también es uno de los principales en la toma de decisiones, el pasado martes mandó desarmar a la Policía Michoacán de Tepalcatepec e investigarlos por lo sucedido el pasado sábado, pero parecen que algunos actores políticos se les olvida que él es uno de los representantes federales más fuertes en la entidad.
Un año del Gobierno de Silvano.
Michoacán no es un estado fácil, lo que ha sucedido en los últimos años es causa de una polarización no sólo política, también social, un debilitamiento institucional, corrupción, finanzas endebles y poca atracción de inversiones.
Silvano Aureoles sabía el reto que esto representaba, y aunque haya actores que quieran sacar raja política de temas como el de seguridad, en un año hay avances significativos en materia de Desarrollo Social, economía, y amplía coordinación con el Gobierno Federal para dar mejores resultados a los michoacanos.
Las finanzas estatales no son las idóneas, es por eso que se requiere en gran parte de la Federación para lograr bajar programas y beneficios para los sectores vulnerables, sin embargo, Aureoles no sólo ha reforzado la coordinación, sino que ha sido un gestor constante para tener resultados palpables.