Se inauguró la exposición “Nuestras Expresiones”, ensamble de creatividad, diseño, talento y, exquisitez de cuatro mujeres empoderadas, que han conquistado con su talento a personas adultas, adolescentes y jóvenes de Guanajuato y muchos otros espacios nacionales e internacionales.

En el patio central y salas de exposiciones del Museo Luis Mata Maciel, del H. Ayuntamiento de  Acámbaro, Gto. se llevó a cabo la exposición del Colectivo de Mujeres en el Arte, que integran cuatro mujeres michoacanas: Blanca Torres, Gina Flores, Luz Salazar y Martha López. Tres mujeres de increíble pulcritud en sus trazos y pinceladas, de inmejorables expresiones en el manejo de la paleta de multicolores, pintando en diferentes técnicas y acompañadas en su fortalecimiento por un gran pintor el maestro Juan Torres y artistas mujeres europeas.

Ahí también disfrutamos del arte plumario, una exposición exquisita, delicada, elegante, apoteótica de mas de dos decenas de estupenda obra en formato pequeño y mediano, que nos ofreció un manejo increíble de las plumas de las aves y tu intenso color para conformar verdaderas transformaciones de la pluma en vida a la pluma en arte, es decir, la utilidad de la pluma cuando se cae de las aves y cuando esa vida del ave, es una vida que muere. El arte plumario es un ejercicio prehispánico, que hoy nos presentan en una experiencia de veintidós años de trabajo comprometido, fecundo, fértil que irrumpe con su gran fuerza la sala en donde se presentó.

Me llama la atención la humildad de las artistas en sus reflexiones al momento de su presentación en el acto inaugural, frente a la magnificencia de su obra. Ellas, ejercen las virtudes sociales, son humildes sí, y también generan caridad, entregan su humanidad, que es su talento a la sociedad, lo hacen reinterpretando la realidad de lo posible, de tocar el corazón con su obra. Su espiritualidad y respeto por el otro no tiene comparación, dos obras me llaman la atención, la Virgen de Guadalupe, extraordinaria pieza, y el retrato de Frida Kalo, magnifica expresión del rostro, fuerte, pero a la vez cero, firme en sus convicciones, que rescate de las emociones del retrato.

En las entrevistas que se les hice por separado a tres de las cuatro mujeres artistas, les preguntaba, ¿de dónde sale la creatividad, de dónde el talento, quiénes son sus musas?, con una mirada fija, llena de energía, con emoción y mucha pasión me dijeron, que es la experiencia, es la experiencia de vida, el comprender la realidad, desde los colores, desde manchar una hoja blanca para ir dando sentido a la creatividad y expresar la realidad desde la perspectiva de género.

Un ensamble con mucho color, como somos los latinos, colores vibrantes: rosa mexicano, azul, rosa, amarillo, rojo, aun en los colores fríos, se deja sentir ese halo que invertido, genera una  luz intensa que le da sentido al contenido.

La exposición también nos lleva a comprender el ejercicio de las dinámicas del arte, de los actos estéticos, de la búsqueda de la belleza en el arte de la mano de la mujer, pero que retrata a la belleza de la naturaleza. Una complementariedad que nos impulsa a pensar en la posible, en el encuentro del arte de la naturaleza y la creatividad de la mujer; un acompañamiento de los seres vivos, de las plantas y la humanidad, dando respuesta a las necesidades de creación y desarrollo de políticas públicas para el arte.

El espacio público debe atender las propuestas de arte, para compartir con la población, los espacios públicos deben de dar paso a todas las expresiones de arte para resignificar el valor que tiene una expresión arrancada de la fuerza y vigor de un brazo operador, de una mano que sostiene con firmeza y a la vez delicadeza los pinceles, para plasmar el color de la realidad, el color de Pachamama, el color de Gaia, por al final, somos todos, todas la naturaleza.