Llegan las encuestas y Andrés Manuel López sonríe complacido.
Aunque el Instituto Nacional Electoral (INE) sea “parte de la mafia del poder y quisiera desaparecernos”, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) crece y obtendrá su registro definitivo en las elecciones de junio próximo.
Le espera larga vida y cientos de millones de pesos anuales en prerrogativas, bancadas en los congresos federal y estatales, tal vez algunas alcaldías y más cargos públicos para crear su plataforma presidencial del 2018.
Todo eso significa poder y una riqueza infinita.
Pero al Peje le entusiasma más el Distrito Federal.
Siente ya suyas muchas diputaciones y dos delegaciones, la de Iztapalapa con Clara Brugada y Cuauhtémoc Ricardo Monreal.
Hay otras donde encuentra posibilidades de victoria, pero ambas tienen trascendencia propia.
La primera por ser la más populosa y por ende la de mayores recursos, y la segunda porque es sede de los poderes nacionales y del Gobierno del Distrito Federal (GDF), con todo y la emblemática Plaza de la Constitución.
Serán foro y pinza para presionar a todos: al presidente Enrique Peña, al jefe de Gobierno Miguel Mancera, a la Cámara de Diputados por más recursos, a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF).
Ese es el sueño y la maquinación del Peje va.
PEPENA NACIONAL DE MOVIMIENTO CIUDADANO
No será quien “sacuda al país” como le dijeron al aceptarlo, pero la candidatura de Marcelo Ebrard es parte de muchos objetivos deDante Delgado.
Este aprovechó la coyuntural lejanía de Andrés Manuel López, ahora dedicado a fortalecer su partido y garantizarse tranquilidad de por vida, para dar un paso audaz en aras de fortalecer su Movimiento Ciudadano (MC).
Delgado pergeñó reunir liderazgos regionales, muchos de ellos desechados por otros partidos y los frutos parciales le dan la razón.
Algunos nombres de esta mezcla interesante:
Fernando Elizondo, ex gobernador de Nuevo León y ex senador por el Partido Acción Nacional (PAN), le dará votos suficientes para mantener el registro.
En Guerrero Luis Walton ha enfrentado problemas derivados de su paso por el violento Acapulco, pero también le proveerá de un caudal significativo de sufragios.
En Tamaulipas la esperanza está puesta en Gustavo Cárdenas Gutiérrez, ex presidente municipal de Ciudad Victoria y ex senador de la república.
La ex senadora María Elena Orantes, quien abandonó al Partido Revolucionario Institucional (PRI) cuando no la hicieron candidata a gobernadora en 2012, ahora forma parte del MC.
En Sonora la ex panista y ex alcaldesa Dolores del Río trata de reverdecer bajo el cobijo Movimiento Ciudadano: no será presidenta municipal de nuevo, pero algo aportará.
PANCHO DOMINGUEZ HACE LA PAZ CON MADERO
1.- Francisco Domínguez, a quien todos identifican con el calderonismo y en especial con el senador Ernesto Cordero, tomó la iniciativa de buscar al grupo de Gustavo Madero.
Habló con su comité y se reunió con su ex competidor y actual coordinador del bancada azul en la Cámara de Diputados, Ricardo Anaya, en aras de obtener su apoyo.
Tras esos encuentros declaró aliviado:
“Me siento con una enorme responsabilidad por la confianza que da la militancia de mi partido y el respaldo del CEN nacional”.
2.- Ya comenzó la guerra de encuestas rumbo a las elecciones de junio.
En Guerrero la empresa Parámetro Investigación difundió un muestro levantado 17 y 18 de febrero y da ventaja al candidato priístaHéctor Astudillo sobre la perredista Beatriz Mojica: 43.39 y 37.05 por ciento, respectivamente.
Y 3.- la estrategia de seguridad en Tamaulipas se fortalecerá con la multiplicación de cámaras.
Se han instalado más de mil en Ciudad Victoria, Tampico, Madero, Altamira y Reynosa-Río Bravo, y pronto el programa se extenderá a Nuevo Laredo, Matamoros-Valle Hermoso y El Mante.
El anuncio lo hicieron el gobernador Egidio Torre y el comisionado Nacional de Seguridad Pública, Monte Alejandro Rubido, al inaugurar el C-4 de Tampico.