A crecer la familia
Con esa frase: Los mexicanos tenemos memoria, pero no dignidad, Carlos Albert cerró su artículo en Milenio.
R- Grrr, obviamente Carlos Albert se refería al cinismo con el que la FemexFut maneja el “negocio” del futbol al margen de un interés real por lo deportivo.
S- Eso me queda claro, mi Rufo, de otra manera no podría entender la alineación durante 90 minutos del Chicharito, ni el que se haya agandayado el balón para tirar en forma tan ineficiente el penal contra Panamá.
R- Auuu, comparto tu deportiva opinión, tal parece que hay el compromiso de hacerle el caldo gordo al Manchester United para que no se devalúe el Chicharo, antes de honrar la palabra de Vucetich, quien dijo: “No alinearé a quienes no estén en su mejor momento.”; y el Chicharito no está en su mejor momento.
S- ¡Bien mi Rufo!, misión cumplida, terminamos el artículo, vámonos a descansar.
R- Grrr, que misión cumplida ni que ocho cuartos, mi ínclito humano; la colaboración de hoy nada tiene que ver con el futbol; si usé la frase de Carlos Albert como título, es porque coincido con su visión de que a los mexicanos nos falta dignidad; de otra manera no entendería que Cámaras Empresariales, Colegios de Abogados, ONG´s y demás organizaciones de la sociedad civil, se queden calladas ante el atraco que significan para el erario y el dinero público (del pueblo de México), los inmorales arreglos y cochupos que en lo oscurito tiene el gobierno federal con la CNTE y con el SME, pasando por la corrupción asociada, al gastar ilegalmente dinero público los gobernadores de Michoacán, Guerrero y Oaxaca, cuando aceptan pagar salarios, prestaciones, prebendas y chantajes a los maistros que no trabajaron.
S- ¡Ta´ güeno!, no te molestes, perro; desarrollemos ese tema, que finalmente nos describe como ciudadanos.
R- Guau, empecemos por llamar a las cosas por su nombre: Luz y Fuerza del Centro fue liquidada, es decir, la empresa desapareció; y la desaparecieron por corrupta, por ser inviable, por dilapidar anualmente miles de millones de pesos y por ineficaz, a partir de la permisividad de funcionarios públicos podridos y de, en mi opinión, tener en complicidad a un sindicato también putrefacto, un sindicato que vendía plazas y que hacia negocios, incluido el chantaje y la venta de servicios electorales, como forma de allegarse recursos. Y para muestra un botón, la inexplicable (o muy explicable) riqueza del lumpen que tienen como líder, Martín Esparza, que lo mismo se le ve junto a AMLO que en un evento del PRI de EPN.
¿Como una empresa inexistente puede otorgar una pensión vitalicia de $15,000 pesos/mes con dinero del pueblo a trabajadores cuyo único mérito es hacer desmadre, tomar calles y amenazar? ¿Con qué recursos puede una empresa inexistente adquirir compromisos?, mi opinión es que por corrupción de las autoridades que otorgan la prestación con dinero que no les pertenece (ni está presupuestado); pero eso no es lo que sorprende o lo más grave, hasta me atrevería a decir que, en mi perruna opinión, hasta es parte del folklor nacional el que funcionarios, de todos los niveles, dispongan de dinero público para comprar conciencias, tranquilidad u apoyos electorales; no olvidemos la impúdica conducta de Felipe Calderón cuando entregó instituciones de la República: la Lotería Nacional, el ISSSTE y la Subsecretaría de Educación Básica de la SEP, a gente de la hoy defenestrada Elba Esther Gordillo, a cambio de apoyos electorales… Y antes de que salgan en su defensa fanáticos calderonistas, diciendo que la política es el arte de la negociación y que el Presidente negoció en beneficio de México, les diré que quien comprometió y entregó instituciones, no fue el Presidente Calderón, que quien lo hizo en forma vergonzante y corrupta, fue el candidato Calderón, pervirtiendo no solo el patrimonio nacional y a las instituciones de la república, sino hasta el proceso electoral ¿O no es delito comprar votos y apoyos con dinero y recursos del pueblo? ¡Pero en fin!, decía que no me sorprende la corrupción institucional de funcionarios, tan bien reflejada por Rius en sus Supermachos y por Damián Alcázar en la película histórico/futurista que, en mi opinión retrata el sistema político y de gobierno actual: La Ley de Herodes; sino que mi perruna atención es captada por la docilidad del pueblo de México y de sus organizaciones civiles y empresariales; que simplemente por temor, apatía o complicidad silenciosa, callan ante flagrantes actos de corrupción.
S- Nada que objetar, mi Rufo; qué bueno que te decidiste a continuar con el artículo. Los ciudadanos mexicanos necesitamos que de vez en cuando nos jalen las orejas.
R- Grrr, no mi Santias, el problema de México no se resuelve con un jalón de orejas, se resuelve con ciudadanos comprometidos, organizados y honestos, dispuestos a jugársela contra el sistema, con el corazón en la mano y con los “esos” bien puestos… ¡Así de sencillo!