La corrupción: más que una cuestión de valores
“La Ley de la Gravedad”
Hoy la noticia es que Hillary Clinton señala a México como país de ilegalidades y torturas; el gobierno mexicano calla dócilmente; no es Trump.
S- Mi Rufo: Fíjate que estoy cansado de denunciar la corrupción, entreguismo y cobardía del gobierno peñista; de la misma manera que me he pronunciado en contra de la desvergüenza de Ricardo Anaya, Presidente del PAN, para nombrar a un, en mi opinión pillo, Miguel Ángel Yunes, como candidato a gobernar Veracruz; cosa que ningún veracruzano ni el partido Acción Nacional se merecen; y ya encarrerado el ratón, mencionar que si no es delito, si es un abuso de Ricardo agandallarse, al puritito estilo de AMLO, los espacios de difusión del partido para lucirse, eso sí, con un discurso moralista donde enfatiza su posición para luchar contra la corrupción, mientras deja intocados a los pillos de los “moches” que pululan en el PAN, empezando por su ícono el ex gobernador Padrés; tampoco he dejado de señalar como el Partido Verde está infiltrado de pillos tramposos y vividores, que Morena es un chiste que se cuenta solo y que el PRD, empezando por su Maximiliano, Agustín Basave, traído de fuera para gobernar, son unos inservibles, incoherentes, corruptos, encubridores e incapaces que le apuestan a las alianzas al no tener ni cuadros ni propuestas propias que convenzan al electorado. De los demás partiditos, nada que decir, vividores del presupuesto todos; incluido el vergonzante partido del Panal, que exhibe el sentido político y de falta de compromiso de miles de maestros; una de las razones por la que en México estamos como estamos.
R- Grrr, mi Santias, ¿no habrá algún político que se salve de la quema que le acabas de dar a todos los partidos?
S- Hay muchos, mi Rufo, en los partidos todavía hay gente decente y comprometida, pero no pesan; es como jugar baraja cuando unos hacen trampa y otros no: ¿Quiénes van a ganar siempre? ¡Pero tienes razón!, siempre debo decir, al señalar a un instituto político o gobierno de corrupción: ¡Salvo algunas excepciones!.. El punto es, perro, que me canso de hacer señalamientos y que el pueblo de México no solo siga aguantando a estos pillos, sino que hasta los veneren; caso especial el de las Cámaras empresariales, que se desviven por estar cerca y aplaudir a un pillo como en mi opinión es EPN; todo para estar cerca de “donde se cuecen las gordas” y alcanzar algo de las migajas con las que suelen tranquilizarles mientras desmantelan al País y entregan la soberanía y la dignidad. Acuérdate, inicié este artículo mencionando la cobardía y entreguismo del gobierno federal al callar contra las críticas de Hillary Clinton (manipuladoras, intervencionistas y con clara intención de control político y económico) y lamentarse cual llorona lastimera como Peje despojado, ante los insultos de Trump que en lo personal me parecen de risa.
El punto es, mi Rufo, que hay cosas más importantes y menos frustrantes que ver a un pueblo dejado, cobarde, acomodaticio y agachón al ser esquilmado por políticos, rufianes (valga la redundancia) y demás lumpem´s que abusan de México; como el tema de la Ley de la Gravedad que si bien conozco, no logro entender como un objeto puede atraer a otro sin que medie entre ellos alguna fuerza como la del magnetismo; es decir, sé que un cuerpo atrae a otro, pero cuál es la fuerza, energía o elemento que produce dicha atracción. Einstein decía que no era tal, que la curvatura que produce un objeto en el “espacio tiempo” en función de su masa (peso) es lo que genera la atracción gravitatoria, el punto es que repetirlo o decir que la gravedad tiene una aceleración promedio de 9.81 m/s2 en la tierra, no me ayuda para comprender como esa curvatura en el “espacio tiempo” me atrae al centro de la tierra o atrae a un objeto con otro, porque ni siquiera detecto, veo o percibo el “espacio tiempo”, ya que el espacio entre objetos en el espacio es llamado vacío y en la tierra no veo esa curvatura que menciona Einstein o la sustancia sobre la que se ejerce la mentada curvatura.
R- Guauuu, mi Santias, creo que te metes en camisa de once varas; para empezar no creo que entiendas siquiera la relación o concepto: “espacio tiempo”, menos vas a entender la interacción de la masa de un objeto para darle una curvatura que, sin que medie ninguna fuerza, haga que un objeto sea atraído por el otro y qué decir del “vacío que no es vacío; ¿Por qué no te resignas y aceptas simplemente que: así es la cosa?, y regresas a lo que es más mundano y explicable; como la corrupción que corroe el mundo (ver Panamá-Papers) y que en México se magnifica de manera alarmante al grado que hace temer por la viabilidad social de una democracia incipiente que sirve a grupúsculos que desde los partidos se agandallan el derecho a proponer candidato con financiamiento público; mientras el pueblo de México trabaja para darles vida de reyes a estos bandidos que poco a poco matan la gallina de los huevos de oro entregando las riquezas nacionales a intereses extranjeros en donde la ley es simple: El capital (el dinero) es Dios, en tanto el ser humano es desechable… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.
Santiago Heyser Beltrán
Escritor y soñador