Poder y dinero
Se fue, pero se quedó. Partió físicamente, mas su presencia, su alegría, su recuerdo, su trascendencia siguen intactos entre quienes lo trataron y entre quienes lo quisieron. Y así, Noé Alcalá Galán, el hombre, el hijo, el hermano, el amigo, continúa ganando batallas, a pesar del tiempo.