La opción
Los productores michoacanos que se han convencido de las tecnologías que les permiten sacar al mercado alimentos libres de agrotóxicos, están realizando esfuerzos para comercializarlos y semanalmente forman pequeños tianguis en ciudades como Morelia, Pátzcuaro y Erongaricuaro para llegar de manera directa con los consumidores, bajar el costo de sus productos y promover el consumo entre la población.
El principal problema que enfrentan ahora es la falta de espacios en donde promover la venta y el consumo de alimentos de origen orgánico, la solución que han encontrado hasta ahora es unirse para reunirse semanalmente en diversos puntos, incluidas algunas escuelas, en donde se promueve sus productos entre las amas de casa que acuden por los infantes a los centros educativos.
El hecho de no existir el “Producto Orgánico” como tal en los planes del gobierno federal, ni una ley de producción orgánica en Michoacán que proteja a estos productos y a los productores, se presta a fraudes de comerciantes y todo afecta a quienes se han convencido de producir limpio y sin agrotóxicos en la entidad, ahora los únicos defensores de esta actividad son quienes ya los consumen por su sabor y la salud que han logrado en sus cuerpos.
“A raíz de algunas intolerancias que presento mi hijo hace ya algún tiempo, busque alternativas para su salud y descubrí que el problema era el consumo de productos en su dieta lo que le provocaba los malestares, durante ese tiempo me la pasaba en el médico, pero encontré el mundo de los alimentos orgánicos y son ya tres años que deje de acudir a clínicas y hospitales, ahora mejor le invierto a la salud de mi familia”. Señalo la señora Georgina Talavera, a Quadratín mientras realizaba sus compras en la tienda solidaria El Árbol.
Sobre el precio de los alimentos de origen orgánico, señalo que son muy caros si se buscan en las grandes cadenas comerciales trasnacionales porque vienen de otros países, pero con este sistema de venta directa con los productores de Michoacán inclusive se adquieren a costos iguales que los convencionales y más frescos, por lo que dijo hay que apoyarlos para que sigan trabajando en este sentido y se apoye a la economía local del campo.
Fátima Coria, comercializador y productora de Pollo, Pavo y Huevo del municipio de Ario de Rosales, explico que hace falta sitios en donde poder acudir a vender sus productos orgánicos de manera directa a la población, con lo cual se bajarían costos para este alimento sano y más familias tendrían acceso a una alimentación que ayude a la salud de los michoacanos, pero no han tenido el apoyo de los sectores de gobierno para lograrlo.
En los municipios cercanos a Morelia se producen; pollo, pavo, huevo, hongo seta variedad gris, productos de maíz orgánico (tortillas, gorditas) y verduras, lácteos artesanales y naturalesy lo que hace falta es un sitio en cada población que les permita acudir a expender y comercializar a precios similares a los de producción tradicional para que la población pueda acceder a alimentos libres de pesticidas y químicas ya prohibidos por la organización mundial de la salud.
El gobierno federal cada año anuncia grandes inversiones para la construcción de hospitales y la compra de equipos para diálisis y centros de aplicación de quimioterapia para combatir diabetes, cáncer y otras enfermedades que dañan la salud de la población, para alentar la agricultura y ganadería orgánica aún no vemos nada a ese respecto, incluso una iniciativa de Ley de Producción Orgánica presentada al Congreso de Michoacán el 9 de junio del año 2013, esta empolvada y sin respuesta.
La pregunta es hasta cuando se alentara una cruzada por una producción sana y limpia sin los agrotóxicos que ahora nos destruyen y matan lentamente, hasta cuando los gobernantes y funcionarios se darán cuenta que la solución está en el campo y no en la importación de semillas como el maíz, mientras se autoriza sembrar en México transgénicos. Mientras. Solo resta esperar que se forme un Centro Nacional de extensionismo y capacitación anunciado por el Dr. Jorge Galo Medina Torres en una serie de cursos de capacitación que se dieron a productores y comercializadores de FIRCO por parte de SAGARPA, para empezar a creer que a alguien importa la salud de los mexicanos.