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¿Caza de periodistas?
Es hora de hacer efectiva la solidaridad en el gremio periodístico, porque no es lo mismo un zape a Martinoli y protestar en las redes, que el artero asesinato de un periodista, como el caso del joven fotógrafo, Rubén Espinoza, quien fue ultimado en un departamento del DF junto con cuatro personas más (una de ellas activista política y otra extranjera).
Desconozco la o las razones por las que se le privó de la vida y quizá nunca las sabremos a ciencia cierta.
Las primeras indagatorias apuntarían en el sentido político, como una especie de represalia del gobierno hacia su persona, y es que el periodista jarocho pudo haberse “autoexiliado” hacia la ciudad de México por razones de seguridad ante el hostigamiento del gobernador, Javier Duarte, de quien el ahora occiso denunciaría tiempo atrás agresiones y amenazas, y no solo por su quehacer periodístico, sino por su activismo político.
Ciertamente, el actual gobierno del estado de Veracruz se ha caracterizado por tener en su haber al menos 14 periodistas muertos; cifra escalofriante y grotesca pero… ¿cuántos periodistas fallecieron por el ejercicio de su profesión y cuántos por estar simplemente en el lugar y momento equivocados?
La realidad es que el principal afectado por esta muerte (políticamente hablando), es precisamente el gobernador Duarte, cuyo gobierno habría fustigado a Rubén. Entonces… ¿definitivamente el gobernador veracruzano mandó ejecutar al fotoperiodista y de paso a sus cuatro acompañantes para hacer creer a la opinión pública que se trató de un simple atraco? ¿Lo mandó asesinar por una fotografía en la que el gobernador Duarte se ve panzón y mal encarado?
Hoy, SDP Noticias consigna que la Procuraduría del Distrito Federal ya tendría a un testigo clave. Se trata de una joven mujer que desistió de participar en la reunión organizada por sus amigas, hoy muertas, debido a que no conocía a ninguno de los cuatro sujetos que llegaron al departamento.
Yo no tengo la menor duda de que en las siguientes horas, el caso será resuelto por la Procuraduría capitalina. Aquí el problema es si se trató de un simple atraco que se salió de control ¿quedará la sociedad conforme con el resultado, especialmente el gremio periodístico? ¿Se aceptarán las pruebas periciales y testimoniales y concluir que Rubén y acompañantes estaban con las personas equivocadas?
Pues no, no habrá conformidad. Lamentablemente no es fácil asimilar la muerte de un colega y, más aún, no resulta nada sencillo aceptar que no fue el Estado una vez que se le acusó como el directamente responsable por esas muertes. Hay mucho orgullo en el gremio.
¿Y si efectivamente el gobernador Duarte habría sido el responsable? También pudiera ser que matones a sueldo se hayan hecho pasar como amistosas personas que, con meticulosa persuasión, lograron ganar la confianza y hasta la invitación de los fallecidos para ser partícipes de un convite, que luego aprovecharían para ejecutar a Rubén y al resto de las chicas. Luego, saquear el departamento y huir a bordo de un vehículo propiedad de una de las fallecidas.
No sé si haya más líneas de investigación, pero una de estas dos que les propongo deberá ser desechada o aceptada, porque una no cuadra.
Pero independientemente de todo, para el caso que hoy nos ocupa y preocupa, tan lamentable sería que la muerte de Rubén y acompañantes fuera por un simple atraco que por su ejercicio periodístico. Cualquiera que sea el caso, yo me sumo a ese grito que al unísono pide justicia, pero sobre todo, esclarecer los hechos con razonamientos científicos.
LEY ANTIMARCHAS
He escuchado opiniones muy diversas en torno a la Ley de Movilidad o también llamada “Ley Antimarchas” y para organismos rijosos, como los normalistas, la CNTE o la CUL, que se asoman a los umbrales del valemadrismo ¿les importará apuntarse en la lista de turnos para marchar? ¿Estarán dispuestos a regular su modo de vida? ¿Dejarán de marchar porque la Avenida ya está apartada?
Esta iniciativa se me hizo una muy mala idea desde el principio. Es la creación de una nueva ley que nació para ser violada sistemáticamente.
Buen lunes para todos