Carlos A. Monge M /Quadratín
Isla de la Palma…
“Más que las ideas, a los hombres los separan los intereses”… Alexis Tocqueville (1805 – 1859). Político e historiador francés.
Otra vez el caso Isla de la Palma regresa a la polémica estatal, con el aderezo de la participación federal, ahora sí, en manos del comisionado Alfredo Castillo Cervantes, quien invitó para atender semejante labor a Manuel Antúnez Álvarez, hasta el pasado lunes secretario de Desarrollo Económico del Gobierno de Michoacán.
Por cierto, parece que en dicha determinación de Castillo Cervantes, no hubo mucho dialogo con el mandatario estatal, considerando que el propio Fausto Vallejo argumentó que Antúnez Álvarez renunciaba por cuestiones personales. Vale tener presente que suman ya 3 personas las que han pasado por dicha dependencia, sin mayores resultados y en muy poco tiempo.
En fin, veremos si esta vez es posible que el Comisionado y su nueva contratación logren en primera instancia transparentar el listado de dueños y cómo lograron sus terrenos; pero también y principalmente para que haya un efectivo desarrollo en el Puerto de Lázaro Cárdenas a través del pleno aprovechamiento de las 444 hectáreas que conforman la Isla de la Palma, de las que la mayoría, se encuentran todavía desaprovechadas.
Por la importancia y conflicto que ha representado este estratégico territorio porteño, bien vale la pena hacer un recuento de algunas circunstancias que se han presentado desde la era Lázaro Cárdenas Batel.
- El 12 de febrero del 2007 firmó una “Carta de Intención” el gobierno de Cárdenas Batel para “obtener los inmuebles e inversiones necesarias para que Kansas City Southern de México (KCSM) construya, opere y administre una terminal intermodal ferroviaria” en el Puerto de Lázaro Cárdenas, así como gestionar ante el Congreso del estado la desincorporación de las hectáreas para crear un fideicomiso y así, permutar las tierras libres de todo gravamen a KCSM, por obra pública que la empresa realizaría a favor del Gobierno de Michoacán.
- Por KCSM firmó dicha “Carta de Intención” José Guillermo Zozaya Délano, quien manifestó que de lograr las 110.14 hectáreas solicitadas, realizarían una “inversión en el proyecto de la Terminal Intermodal Ferroviaria de 80 millones de dólares, en beneficio del servicio público de transporte ferroviario que opera en el Puerto de Lázaro Cárdenas”.
- Incluso el Gobierno de Michoacán, manifestó también su “intención de otorgar a KCSM, a medida de sus posibilidades y apegado a normatividad, incentivos, estímulos y apoyos fiscales en términos de la legislación aplicable”.
- En semejante “Carta de Intención” y pese a su enorme importancia, así señalada por autoridades e interesados, los involucrados optaron por establecer que “las partes mantendrán en plena confidencialidad y no divulgarán a ningún tercero, los documentos o cualquier material relacionado con el contenido, desarrollo y ejecución del Proyecto y/o de los contratos definitivos”.
- Lo que empezó mal, continuó de igual manera. El 17 de mayo del 2008, ya como gobernador de Michoacán Leonel Godoy Rangel, se firmó un nuevo convenio con KCSM; que incluía desarrollar un Parque Industrial donde se podrían enajenar espacios a favor de empresas privadas.
- Con las firmas de Leonel Godoy Rangel, Fidel Calderón Torreblanca y nuevamente Eloy Vargas Arreola, una vez más determinaron y se obligaron las partes a “mantener en estricta confidencialidad toda la información a que tengan acceso en virtud del presente Convenio, absteniéndose de comunicarla a cualquier tercero, así como a cualquier funcionario, empleado, agente o representante que no se encuentre directamente relacionado con la operación”.
- En aquellos días, surgieron listados de presuntos beneficiados con terrenos en La Isla de la Palma, donde figuraron empresarios michoacanos “cuates” del gobierno en turno; situación que causó tal cantidad de enredos, que le costó la chamba a Eloy Vargas Arreola.
- Finalmente el 2 de junio del 2010 y en medio de un enorme sospechosismo de compra de votos entre legisladores perredistas y panistas, porque los priistas votaron en contra, se aprobó la desincorporación de 444 hectáreas de la Isla de la Palma.
- El tema estuvo tan contaminado, que en el conteo final para la aprobación, el entonces presidente de la Mesa Directiva, el panista Carlos Quintana, señaló que había 28 votos a favor, 10 en contra y 1 abstención, para sumar un total de 39 votos; con el pequeño detalle que a la sesión faltaron 4 legisladores, los panistas: Macarena Chávez y Librado Martínez; así como los priistas: Guadalupe Calderón y Eligio González; es decir, máximo debieron ser 36 votos.
- El colmo fue que pese a votar a favor de la desincorporación para dejar en manos del Ejecutivo estatal y el Fideicomiso 2112 la posibilidad de vender más de 200 hectáreas, los diputados perredistas votaron y a la par señalaron: “en pro de la desincorporación, pero no a la venta”. Discurso demagógico, contradictorio y falto de respeto a la población.
Valga este pequeño recuento del pasado para tener clara la opacidad con la que se ha tratado todo lo relacionado con la Isla de la Palma. Desincorporación que dejaría desarrollo en el Puerto de Lázaro Cárdenas, que lograría inversiones de KCSM para puentes vehiculares, pero sobre todo, para una nueva central ferroviaria fuera de la capital michoacana.
Hoy la mayoría de los compromisos que tuvieron que hacer públicos los opacos gobiernos de Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel, así como la empresa monopólica KCSM, presentan avances extraordinariamente pobres para la población.
Veremos si el Comisionado Alfredo Castillo y el gobierno que encabeza Fausto Vallejo Figueroa, son capaces de transparentar, rendir cuentas y promover que se cumplan todos los compromisos adquiridos con los michoacanos. Ojalá.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.
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