Sin restarle méritos a su capacidad de convocatoria y presencia en territorio moreliano, pero el triunfo de Alfonso Martínez Alcázar se explica en gran medida por la seria división que prevaleció tanto en el Partido Revolucionario Institucional como en el Partido Acción Nacional.
Así, los poco más de 75 mil votos obtenidos por el candidato independiente y hoy alcalde electo Alfonso Martínez Alcázar nos indica que no fue una abrumadora mayoría de morelianos los que le manifestaron su respaldo.
Estamos hablando que ganó la confianza de alrededor de un 13 por ciento del total del electorado en el municipio de Morelia, el cual rebasa los 560 mil electores. Los votos obtenidos por Alfonso están muy por debajo de los que consiguieron Marko Cortés Mendoza y Wilfrido Lázaro Medina en las pasadas elecciones ordinaria y extraordinaria, respectivamente, que fueron arriba de los 120 mil votos cada quien.
Es de suponerse que a su salida de Acción Nacional, Alfonso Martínez se llevó consigo la simpatía de miles de panistas que, sin renunciar a Acción Nacional, optaron por ofrecer su voto a la nueva figura electoral.
La renuncia de Alfonso Martínez a las filas panistas creó una seria división en este instituto político, en donde se suponía que no le haría mella alguna ese acontecimiento rupturista. Al tiempo se concluyó que uno de los más lastimados en el proceso de elección para la Presidencia Municipal de Morelia fue precisamente su candidato Ignacio Alvarado Laris.
El otro escenario que contribuyó al triunfo de Alfonso Martínez fue la grave división manifiesta en las filas del Partido Revolucionario institucional. Ya se sabe que la imposición de Jaime Darío Oseguera como candidato de este instituto político a la alcaldía moreliana derivó en la renuncia al PRI de otro aspirante, Carlos Río Valencia, y el rechazo de quien fuera cuatro veces presidente municipal de la capital del estado, Fausto Vallejo Figueroa.
Carlos Río Valencia fue designado candidato del Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES) y logró conseguir alrededor de 13 mil votos, cifra ésta nada despreciable y que se supone podría haber ido a las actas de Jaime Darío Oseguera, quien logró obtener un poco más de 64 mil votos. Ya se dice que fue Carlos Río Valencia quien impidió el triunfo de Jaime Darío Oseguera.
Así, el único candidato de cuidado que tenía enfrente Alfonso Martínez era precisamente Jaime Darío Oseguera Méndez. En la casa de campaña del priista se equivocaron cuando señalaban que el rival a vencer era el perredista Raúl Morón Orozco, quien ocupó el cuarto lugar con apenas 35 mil votos. Pero, tampoco previeron que no pocos militantes priistas votarían por Alfonso Martínez Alcázar.
En Morelia se registraron 9 candidatos a la Presidencia Municipal; un hecho inédito que pulverizó el voto ciudadano y que también podría haber contribuido al triunfo de Alfonso Martínez Alcázar.
Ahora, el alcalde electo Alfonso Martínez Alcázar tiene un gran reto: probar que su propuesta de Gobierno para la capital del estado fue efectivamente la mejor opción que eligió un porcentaje minoritario de morelianos.
CRISTOBAL Arias Solís resurgirá en la política michoacana para aportar su experiencia y conocimiento al nuevo gobierno que encabezará Silvano Aureoles Conejo, a quien desde un principio le brindó su respaldo. Hay que recordar que, no obstante su reconocimiento como un experimentado perredista y haber sido líder del PRD, diputado federal y senador de la República, Arias Solís fue injustamente marginado por los gobiernos perredistas de Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel, con este último, sobretodo, había un pleito feroz. Aunque siempre se mantuvo activo, con bajo perfil de protagonismo -pero no como los que tenía Leonel-, hoy Cristóbal Arias podría volver a ser parte del grupo en el poder estatal. Y ya se le menciona como uno de los políticos idóneos para estar al frente de la Secretaría de Gobierno. Tiene conocimiento de la problemática michoacana y, aunque en otra circunstancia y tiempo, ya cumplió en esa función vital del gobierno estatal. Silvano Aureoles Conejo tendría en Cristóbal Arias a un eficiente colaborador, independientemente del área que éste ocupe. Así, utilizando la terminología de la campaña perredista diríamos que “Cristóbal Arias Solís también tendrá un nuevo comienzo”….MAÑANA sábado se elegirá al nuevo comité ejecutivo del Sindicato Unico de Empleados de la Universidad Michoacana (SUEUM). Los sindicalizados universitarios optarán por una oferta que significa chantajes, presiones, enriquecimiento inexplicable, opacidad en el manejo de las finanzas sindicales, derroche de las cuotas sindicales en casinos, confrontación con la autoridad universitaria y perpetuidad en el poder sindical, como la que ofrece Eduardo Tena Flores , o por un cambio en la política sindical y un manejo transparente de las finanzas sindicales, que están ofertando en gran medida otros aspirantes como Armando Rangel Díaz, Oliverio Esquivel Reyes y Aurelio Alipio Ceja, respectivamente….