Cárceles vacías: retos del Sistema Penal Mexicano
En tanto la educación tenga como objetivo nutrir de obreros y empleados a un modelo inoperante, depredador e inmoral ¡Estaremos jodidos!
Inicialmente puse como título del presente: “¿Que debemos de enseñar?”, pero la realidad es que como estamos educando; solo nutrimos un modelo socioeconómico llamado neoliberal que es inhumano y que pone por delante la ganancia fomentando el consumo que trae aparejadas la destrucción del medio ambiente y la depredación de todo.
Cito a Mafalda en uno de sus cartones: ¿Qué necesita un pájaro para vivir?, ser pájaro. ¿Qué necesita un pez para vivir?, ser pez ¿Y un tigre?, ser tigre… ¿Y un hombre?, ser médico o ingeniero o licenciado o administrador… Es decir, ser hombre no es suficiente para sobrevivir en esta sociedad y ahí está el “quid”.
¿Entonces?, que debemos de enseñar a nuestros jóvenes y añadiría, y a nuestros adultos. En mi opinión dos temas centrales: 1.- Como vivir, y 2.- Como pensar, es decir, vivir despiertos razonando lo que hacemos y decidimos.
Dentro de una conferencia que titulo: “El futuro es tu responsabilidad”, con un auditorio heterogéneo de adultos y chamacones, un joven me preguntó:
—¿Cuales son los mayores problemas de México? —Yo respondí—:
—Tres son los mayores problemas de México: 1.- La pobreza lacerante e inhumana. 2.- La corrupción galopante de todos; unos por acción otros por omisión, y 3.- La decisión consciente de los mexicanos de no razonar (porque genéticamente ¡Aunque Ud. no lo crea!, los mexicanos podemos ser inteligentes si nos decidimos a pensar).
—Dando por buena su respuesta —replicó el joven—, ¿por dónde empezaría Ud. a construir la solución?
—Yo empezaría por enseñar a pensar, a razonar… Si pensamos y tomamos decisiones inteligentes, nos daremos cuenta de que el modelo neoliberal nos autodestruye. Me explico, una sociedad en donde los pobres tienen hambre y los ricos tienen miedo ¡Es disfuncional! Al razonar veríamos que tenemos que cambiar de modelo y nuestra forma de relacionarnos como personas para la satisfacción de nuestras necesidades, que estoy seguro, no es acumulando riqueza a lo pendejo; así combatiríamos la pobreza, la injusticia social y la desigualdad. De igual manera, si actuáramos de forma inteligente, veríamos que es necesaria la organización ciudadana para acabar con la corrupción cínica que hoy en México inicia por quien encabeza la presidencia pero no exime «bajo la premisa estúpida de que la corrupción en México: ¡Es cultural” (EPN dixit)», ni al magisterio, ni al empresariado, ni a las iglesias, ni a las instituciones, ni a la ciudadanía en general; desde el policía que pide mordida, pasando por el inspector corrupto, el taxista que cobra de más, el burócrata que cobra sin trabajar, la mucama que se queda con el “cambio”; hasta el diputado que pide moche y es aplaudido y venerado por sus compinches y se le mantiene dentro de un partido político inmoral que cobija la corrupción «afirmo que todos los partidos políticos son de alguna manera corruptos, cosa de ver las multas del INE por tramposos, todos, o la auto asignación inmoral —vía congresistas— de dineros públicos.», cuando esta se reparte y llega a los bolsillos de muchos.
En otras palabras —puntualice—, si razonamos, acabamos con la corrupción y la pobreza, por eso mi propuesta educativa y de reconstrucción republicana es: enseñar a pensar… Aunque enseñar a pensar, sin saber cómo vivir, pudiera ser insuficiente, por ello insisto: En mi opinión dos temas centrales se deben enseñar masivamente para no estar jodidos: 1.- Como vivir, y 2.- Como pensar… ¡Así de sencillo!