El primer debate de los candidatos a la gubernatura puso a cada quién en su lugar.

 

Silvano Aureoles priorizó las propuestas, posicionó los ejes de su Programa de Gobierno y esbozó sus planteamientos para garantizar la paz, la tranquilidad, la generación de empleos para los jóvenes, reactivar la economía,  combatir la inseguridad, generar un gobierno eficaz, promover apoyos sociales y la construcción de una nueva relación entre gobierno y sociedad.

 

La señora Calderón dejó claro que va a la saga en las encuestas y optó por la confrontación y la polarización. Aventó golpes a diestra y siniestra, se exhibió enojada cuando se refirieron a su hermano Felipe, evidenció su intolerancia, y fueron vastas ocasiones en que confundió temas, o trastabilló, siempre anteponiendo una descalificación a un tema relevante para los michoacanos. En otras ocasiones simplemente prefirió leer, como cuando se le cuestionó sobre la cultura en la entidad. Jamás logró posicionar propuesta alguna.

 

Ascensión Orihuela cayó en la trampa de la confrontación con Luisa María, se vio monotemático, cayó en lugares comunes, se estancó en temas del pasado, se confrontó, dudó una y otra vez, no logró poner orden ni en sus ideas y tampoco logró posicionar propuestas.

 

En un análisis de rigor, fue sin dudas Silvano Aureoles el ganador del debate tanto verbal como temáticamente, porque al final lo que importaba era que los ciudadanos conocieran sus propuestas y planteamientos de cómo resolver los problemas que Michoacán enfrenta.

 

Silvano habló  de frente a los michoacanos, asumiendo una actitud propositiva y logró posicionar los cinco ejes de su propuesta de gobierno:

 

Reactivar la economía para generar empleo, ingreso y desarrollo, esto a través de la reactivación de zonas industriales, una mejor relación entre gobierno y sector empresarial, además de la generación de verdaderos empleos sustentables.

 

Combatir la inseguridad, y en un año garantizar la seguridad en las tres ciudades hoy clasificadas como violentas: Morelia, Uruapan y Lázaro Cárdenas.

 

Un gobierno eficaz que dé resultados, que se maneje con honestidad y transparencia en el uso de los recursos públicos.

 

Un gobierno que promueva y procure el bienestar social, apoyar a las personas con discapacidad, a las adultas y a los adultos mayores, a las mujeres y a los jóvenes. Para las mujeres acceso equitativo a los proyectos productivos, programas especiales de crédito  a la palabra y apoyo a las madres solteras. Para los jóvenes 300 mil becas salario desde tercero de secundaria hasta la universidad y la implementación del Programa “Mi Primer Empleo”.

 

Un gobierno que tenga  una nueva relación con la sociedad, descentralizar la oficina del gobernador para que vaya a las regiones a atender las necesidades y a encontrar soluciones.

 

Al final, a los michoacanos lo que les importa saber es qué propone su futuro gobernador para cambiar la situación del estado, y no que se hizo en el pasado.

 

Bien dicen que una imagen vale más que mil palabras y quedará para la posteridad aquella en la que tras el encuentro Chon le levanta la mano a Silvano, quien a su vez posa con la “V” de la victoria, en una evidente muestra de reconocimiento a quien se vio superior en este primero de dos debates.

 

Un Nuevo Comienzo se acerca y es que Silvano habla hacia el futuro, mientras que la señora Calderón y Ascensión  siguen estancados en el pasado.