JIQUILPAN, Mich., 8 de diciembre de 2018.- De acuerdo a la tradición, la mañana de este sábado en punto de las siete horas salió el contingente de 150 varones rumbo a la capital, hecho que forma parte de la tradicional peregrinación de los faroles en honor a la Virgen de Guadalupe; el contingente partió desde la explanada del Santuario que se ubica en la parte poniente de la ciudad y llegará a la capital del país entrada la tarde, asistirán a misa e iniciarán el regreso tras encender la antorcha que es traída en relevos hasta este municipio.

Estas acciones son parte del recorrido que pone a prueba la fe y la condición física de atletas y devotos de esta ciudad, pues la tradición marca que desde el momento de encender la antorcha en la Basílica de Guadalupe, por turnos, los jóvenes deberán regresar a su tierra en una larga carrera que culmina cerca de las 6 de la tarde del 11 de diciembre en la ciudad de Jiquilpan, para encabezar la sin igual peregrinación de los varones o “Los Faroles” en la que los hombres de la ciudad recorren las calles en filas kilométricas que culminan en el santuario guadalupano en la parte alta de la capital, donde llegan pasada la media noche para entonar las mañanitas a la “Reina de México y Emperatriz de América”.

Aun cuando el recorrido de la antorcha guadalupana es una tradición relativamente nueva, la peregrinación de los faroles es otra en la que los historiadores no terminan de ponerse de acuerdo y hay quienes dicen que fue un rito introducido con anterioridad a la guerra cristera de 1928, en tanto que otros se aventuran a señalar que previo a la llegada de los europeos a estas tierras se tenía ya la costumbre de iluminar con antorchas el camino de las deidades prehispánicas.