JIQUILPAN, Mich., 02 de diciembre de 2016.- Un ejemplar trabajo de reinserción social realiza el Centro Preventivo de Jiquilpan, que ahora y de acuerdo a la temporada, permite que los internos realicen esferas y trabajos que les ayudan a obtener recursos. Francisco Otero Méndez responsable del centro explica: “De 27 internos, 25 realizan alguna actividad que redunda en su beneficio”.
“Estas temporadas son muy especiales tanto para los internos como para sus familias, hemos logrado que puedan fabricar un modelo de esfera muy particular que ya ha tenido una buena respuesta entre la sociedad jiquilpense y la región, gracias a la ayuda de la dirección de turismo del ayuntamiento”.
Algunos internos como Pedro, que está por salir, podrán con lo aprendido aquí dice, podrán integrase a la sociedad poniendo un negocio propio, donde tendrán la posibilidad de obtener recursos para ellos y sus familias. “Estas esferas fueron parte de un proyecto que inició en Puebla, posteriormente lo trajeron a Morelia y ahora está funcionando en Jiquilpan”.
El recurso y lo que se obtiene de las ventas es totalmente para ellos y con esto se ayudan y pueden aportar algo para sus familias. “Este es el primer año que hacemos este tipo de trabajos, así que aún estamos viendo cómo se desplaza el producto, hasta cuándo podremos venderlo etc.”.
Es evidente la motivación de los internos, quienes no dudan en mostrar otros trabajos que realizan durante el año, como muebles de madera y tallas de diversas figuras también en madera, además de cuadros que aseguran ellos realizan en todo el proceso, “algunos que ya tenían el conocimiento lo fueron enseñando a sus compañeros y así es como estamos trabajando en este renglón”, precisa el directivo.
Este tipo de actividades, dice Otero, son muy importantes, pues los mantiene ocupados y además les produce un beneficio económico. “De estas acciones, a lo largo del año y como parte de su proceso de reinserción social, tienen actividades deportivas y cursos que nos brindan instituciones del propio ayuntamiento o el DIF municipal”.
Francisco Otero reconoce que cuenta con pocos internos, lo que resulta en un punto a su favor y el de los propios recluidos, quienes a pesar de su situación reconocen que estas actividades y el respeto que se ha generado por parte de la autoridad “hacen menos difícil estar encerrados…”.