Tres semanas sin agua potable, denuncian indígenas de Zapotán

MORELIA, Mich., 15 de octubre de 2013.- Los habitantes de la comunidad indígena de Aquila que viven en Zapotán, que se ubica en el municipio de Coahuayana, se encuentra bajo riesgo sanitario, en virtud de que carecen del servicio de agua potable desde las inundaciones que ocasionó en la zona el huracán Manuel en días pasados, informó Cornelio Sánchez Valladares, encargado del orden de la localidad.

De acuerdo con sus informes, desde hace ya casi tres semanas, los alrededor de 500 habitantes de origen nahua de esa comunidad utilizan el agua del Río Zapotán para consumo doméstico, en virtud de que el meteoro destruyó unos 600 metros de la red de agua potable que abastecía a la comunidad.

Sánchez Valladares señaló que han solicitado a las autoridades del municipio atender el problema a la brevedad posible, pero refiere que el alcalde Andrés Cárdenas Guerrero ha hecho caso omiso a sus solicitudes y no ha iniciado la reparación de las líneas de conducción dañadas.

“Apenas la semana pasada el presidente municipal decretó a Zapotán como una comunidad saludable, libre de enfermedades. Pero cuánto nos va a durar esa declaratoria si la gente de la comunidad no tiene agua potable y tiene que usar el agua del río para satisfacer sus necesidades más elementales”, dijo la autoridad civil de la comunidad en entrevista telefónica.

Sánchez Valladares señala que los cerca de 500 habitantes de Zapotán carecen de acceso al vital líquido, y denuncia que la atención de las autoridades se ha centrado en las afectaciones agrícolas, “pero se están olvidando las necesidades básicas de nuestra comunidad, y tememos el surgimiento de enfermedades, sobre todo ahora que se habla del cólera en algunas regiones del país”, dijo.

Por ello, informó que están exigiendo la presencia del edil en la comunidad indígena y el inicio de los trabajos de reparación de los 600 metros de la línea de conducción de agua potable.

“Le pedimos al señor Gobernador que tome cartas en el asunto, pues la gente de Zapotán siente que su salud está en riesgo”, concluyó el encargado.