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MORELIA, Mich., 17 de mayo de 2013.- El diferendo que enfrenta la empresa transnacional Ternium con la comunidad indígena de San Miguel de Aquila por la explotación de la mina de hierro que se ubica en ese municipio podría subir de nivel si prospera el punto de acuerdo para que esa empresa exponga ante el pleno de la Cámara de Diputados la problemática de los beneficios mineros de la costa michoacana.
De hecho, el diputado federal Alejandro Carbajal ya ha extendido una invitación a Ternium para presentarse ante la Cámara para tratar el tema, pero la empresa no ha respondido, informó a Quadratín Verónica Bedolla, representante jurídica de la comunidad indígena.
“No sabemos si la empresa vaya a tomarle la palabra al diputado Carbajal, porque creemos que ellos prefieren tratar el problema con el gobierno del estado”, que nos convocó a la reunión que acabamos de sostener” con el subsecretario de Gobernación, Fernando Cano Ochoa, dijo.
“Quizá por ello la empresa designó para esta reunión a dos de sus funcionarios de más alto nivel, pues desde el corporativo que tienen en Monterrey enviaron al señor Jorge Treviño a acompañar a Diego Ferrari, director de Operaciones de Ternium para Colima, Jalisco y Michoacán”, señaló Bedolla.
En la reunión que sostuvimos hoy con el subsecretario de Gobernación, dijo, la empresa trató de responsabilizar a los comuneros de la interrupción de la extracción minera en el predio noroeste, y reivindicó ante la autoridad su derecho a explotar el material que se encuentra en el área concesionada.
Sin embargo, la representante jurídica de los comuneros los deslindó de toda acción en ese sentido, y responsabilizó directamente a la empresa de la interrupción de sus actividades, con lo que “pretenden crear una falsa imagen de la comunidad e inducir a la represión al gobierno del estado”.
“Hemos invitado al gobierno del estado, invitamos al gobierno federal y los invitamos a ustedes a que visiten las instalaciones y verifiquen que la comunidad no tiene retenes ni plantones en ningún punto de la mina”, dijo.
Para Verónica Bedolla, la empresa ha ampliado su actividad a 130 hectáreas, lo que implica la extracción ilegal de 57 hectáreas. “La mayor parte de ese terreno se ubica en el predio conocido como Cuchilla Dorada, de donde también sacan el hierro superficial que llamamos boleo que por derecho corresponde a la comunidad”.
Ello ha implicado extracción irregular de grandes cantidades de hierro y otros metales que no se contemplan en los convenios, además de problemas ambientales que han reducido el acceso al agua a las comunidades y a la devastación de flora y fauna en la región.
La comunidad sólo pide que la actividad de la empresa se restrinja a las 73 hectáreas de concesión vigente, que respeten el ambiente y que no se metan en los problemas que son propios de la comunidad.
Y es que otra de las quejas de los comuneros es que el convenio vigente que firmaron con la empresa el 3 de junio del año pasado establece claramente que el primer pago de regalías debe depositarse en la cuenta de la comunidad y que los sucesivos se realicen en las cuentas individuales de los comuneros que hayan sido aprobadas en asamblea.
En la actualidad, “con el propósito de crear división y enfrentamiento entre nosotros, la empresa no ha depositado los pagos en la cuenta de la comunidad ni en las cuentas individuales autorizadas por la asamblea, sino en las que ellos mismos les abrieron”, tercia uno de los comuneros del Consejo de Vigilancia.
Por eso, “hemos pedido al diputado Carbajal trabaje en la aprobación del punto de acuerdo para que la empresa comparezca ante la cámara y exponga ahí su visión de la problemática”, concluyó la representante.