MORELIA, Mich., 7 de enero de 2014.- Luego de los hechos ocurridos en el municipio de Apatzingán el secretario de gobierno, Jaime Darío Oseguera Méndez, manifestó que hay un escenario de tranquilidad hasta el momento y se percibe una situación controlada, dijo.

Asimismo enfatizó que la línea de trabajo de los gobiernos federal y estatal, será el de no aceptar que haya gente armada que dispare contra otros ciudadanos. Refirió que a diferencia del caso de La Ruana, en Apatzingán se detectó una agresión al Ejército misma que se tuvo que repeler. De igual forma refirió que continúan los peritajes sobre los hechos ocurridos y se esperarán resultados de la Procuraduría. Aunque no minimizó el asunto destacó que los hechos se circunscriben solo a esta zona de la entidad por lo que no es un asunto generalizado.

En tal sentido, expuso que “lamentamos lo que sucedió, es un momento duro para el Estado, es una situación que no podemos minimizar pero es una situación que se deriva de lo que está haciendo el Gobierno en sus diferentes niveles, a nadie le gusta que haya michoacanos que mueran en una circunstancia así pero lo que las fuerzas federales hicieron ayer fue estar pendientes de que no haya grupos armados  caminando en diferentes circunstancias, en el Estado esto va a seguir siendo la línea de trabajo  con la que se va a conducir el gobierno estatal y federal”, resaltó.

Sobre la diferencia de los hechos ocurridos tanto en la Ruana como en Apatzingán, el responsable de la política interna en el entidad, expuso que “la diferencia fue la agresión al Ejército que obviamente tiene  que repeler la agresión, en caso de la Ruana hubo también reacción de las fuerzas federales, son eventos distintos; en la Ruana hubo enfrentamiento entre dos grupos el Ejército se puso en medio para negociar que no hubiera más enfrentamientos, en Apatzingán hubo un enfrentamiento contra el Ejército, no es lo mismo”, apuntó.

Aseveró que durante la refriega en el caso de la Ruana hubo varias circunstancias y que de ambos casos se tiene a varios detenidos; no obstante, reiteró que “al final es lo mismo el Estado no va a aceptar que haya gente armada que dispare contra otros ciudadanos o contra las fuerzas armadas”.

Reiteró que se trata de nueve fallecidos de los que se tiene conocimiento en el caso de Apatzingán.

En este mismo tenor, Oseguera Méndez, indicó que el proceso de desarme en Michoacán ha tenido una serie de fases sucesivas y va a seguir de manera continua; detalló que lo que se hace es impedir que haya grupos armados de cualquier naturaleza de activismo político social que actué en contra del gobierno a cualquiera de sus niveles, estatal municipal o federal, señaló.